Bianchi: "Las pérdidas de las AFP las asume sólo el cotizante y eso es brutal"
El senador independiente acusa que el lobby y las presiones mantienen paralizados en el Senado dos proyectos de ley que buscan obligar a estas empresas a compartir el riesgo.
No son buenos los tiempos que corren para los cotizantes de las AFP. En cualquiera sea el fondo en que estén sus dineros, entregados obligatoriamente a estas instituciones por todos los trabajadores del país, las pérdidas se han ido acumulando, primero, por el escándalo financiero en La Polar y, ahora, por la crisis bursátil mundial.
Peor aún, los economistas coinciden en que la peor alternativa es cambiarse de fondo en este momento y que es muy probable que muchos cotizantes no alcancen a recuperar del todo sus dineros, aún de producirse un efecto rebote en la Bolsa.
Pero mientras los cotizantes ven cómo sus fondos para la jubilación se pierden en cada crisis bursátil, como ya ocurrió por ejemplo en 2008, las utilidades que arrojan las AFP siempre muestran números azules y con muchos ceros a la izquierda.
Es por eso que, por ejemplo, en países como Perú, donde también existe un sistema de AFP, fue el propio Tribunal Constitucional el que exhortó al Congreso a que aprobara una ley que obligue a estas empresas a compartir las pérdidas que se generen por un principio de mínima equidad.
En Chile, sin embargo, la situación es muy distinta. Y si bien hace en julio pasado el senador independiente Carlos Bianchi presentó un proyecto en tal sentido, patrocinado por sus pares Eduardo Frei (DC), Antonio Horvath (RN), Eugenio Tuma (PPD) y Andrés Zaldívar (DC), la iniciativa hoy duerme el sueño de los justos.
"El proyecto está absolutamente paralizado en las comisiones especializadas", que son las de Economía y Hacienda, se lamentó Bianchi, a quien ya no le sorprenden "las presiones y el lobby" que hacen las AFP "para frenar una iniciativa como ésta", al punto que "ni siquiera está en tabla para discutirse un proyecto de esta magnitud".
El senador lamentó "tener que volver a comprobar que será un proyecto que va a morir en el tiempo, siendo que en un tiempo más la situación no va a ser distinta".
"El tema está en que estas empresas cobran por mantener, administrar y colocar tu dinero, pero no asumen ninguna responsabilidad ante la pérdida, la asume sólo el cotizante y esto es brutal", afirmó Bianchi.
A su juicio, "acá deben haber sanciones y tiene que haber una manera de que las AFP compartan el riesgo en conjunto con los cotizantes. De lo contrario, el negocio va por otro sentido y no por el directo beneficio de los cotizantes".
-¿Y por qué no avanza siendo que, por ejemplo, el senador Frei, uno de los patrocinadores del proyecto, es además quien preside la Comisión de Hacienda?
-Quiero entender que ha habido otros proyectos que la comisión entiende que tienen otra prioridad y a éste no se le ha dado la importancia que siento debe tener.
No es, en todo caso, el único proyecto en esta situación. "Pasó lo mismo con uno donde creábamos una AFP estatal de característica social, que perseguía que existiera competencia y tener una AFP sin fines de lucro y que, a todo evento, garantizara la rentabilidad de los cotizantes", explicó.
Por eso, siente que "la gente tiene el legítimo derecho a tener temor y una mirada de desconfianza. Lo que es peor, estas empresas, estas AFP lucran a todo evento y el que asume el daño termina siendo el cotizante".
"Va a llegar un momento en que los miles de cotizantes verán que sus cuentas tienen un tremendo perjuicio. Y nadie asume esa responsabilidad", agregó.
-Usted habla de lobby, pero seamos claros. Eso significa que hay parlamentarios que son presionados para no hacer su trabajo que es legislar. ¿Es así?
-Mire, cuando hay temas como estos, generalmente existen presiones, sugerencias, conversaciones, reuniones, acercamientos, que van planteando distintas posturas, que van haciendo que cambien o se mantengan los criterios. Pero lo relevante es que en el Congreso, cuando vemos que debemos asumir una responsabilidad mayor, deberíamos tener todo el empeño para abordarlo. Y, si no, lo mismo podría hacer el Ejecutivo. Pero no se ha hecho nada y no se ha avanzado nada.
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