Catalina Bu y Sol Díaz presentan shows de dibujo en vivo

Para dibujar, la ilustradora Sol Díaz acostumbra instalarse sola en el escritorio de su casa. Pero en pocos días, la autora de Bicharrakas saldrá de su zona de comodidad para dibujar en vivo ante decenas de espectadores durante un concierto de la banda de jazz Orquesta del Viento.

"Las canciones de la banda no tienen letras, por lo que me invitan a participar con mis dibujos para que construya una historia improvisada a partir de cada canción", cuenta Díaz. "Voy armando personajes y paisajes, cuento una historia. A veces, también les hago caritas a los músicos, los molesto un poco y vamos jugando".

Por su parte, la autora de Diario de un solo, Catalina Bu, tiene una oficina en casa y para dibujar trata de ponerse un horario que no siempre logra cumplir. Y si bien la mayor parte del tiempo trabaja en solitario y no acostumbra que la gente la mire mientras dibuja, también se enfrentará al desafío de trabajar en vivo, acompañando una rutina de la humorista Paloma Salas.

"No tenemos un guión. Es improvisación ilustrada y la idea es que salga algo espontáneo", dice la dibujante. "Es interesante cómo se complementan los lenguajes y lo más bacán es la complicad que se genera con el público: durante el monólogo Paloma no está mirando la pantalla, entonces el público se ríe de lo que ella dice y también de lo que estoy diciendo yo".

Ambas presentaciones, el Concierto Ilustrado de Sol Díaz con Orquesta del Viento y el Stand up Ilustrado de Catalina Bú con Paloma Salas, se enmarcan en el V Encuentro de Cómic e Ilustración en La Reina, y tendrán lugar los días 19 y 24 de agosto, respectivamente, en la Casona Nemesio Antúnez.

Estos espectáculos multisensoriales, si bien son escasos, ya habían llegado a Chile, siendo uno de los más reconocidos el que tuvo a Kevin Johanssen con Liniers el año pasado en escenarios como el Teatro del Lago.

¿Qué dificultades supone dibujar en vivo? Díaz responde: "Implica una cuota de nerviosismo. A veces me quedan monos horribles y tengo que transformarlos como sea. Da miedo enfrentarse al error, pero al mismo tiempo descubro cosas que nunca habría descubierto en mi casa". Por su parte, Catalina Bu dice no tener la preocupación de que sus dibujos se vean bellos: "Para mí, la principal dificultad es no ser literal con lo que están diciendo. La ilustración tiene que ser un lenguaje distinto y entregar otra perspectiva", dice.

En tanto, desde la Casona Nemesio Antúnez explican que los espectáculos ilustrados pueden realizarse gracias al proyector DCP (proyector de cine digital) que adquirieron mediante el Fondo Audiovisual. Las ventajas de este aparato son la nitidez de las imágenes, la claridad de los bordes de la proyección y la capacidad de leer formatos 3D, entre otras. La entrada a estos espectáculos ilustrados tiene un valor de $ 5.000.