Ciclista chileno que dio positivo: "No diré si tomé o no algo"

Wolfgang Burmann, el ciclista chileno de mayor proyección en el último tiempo, ve pasar los días en silencio. Su vida entera la ha dedicado al deporte y ahora un positivo detectado el 18 de septiembre por Efedrina, Anfetamina y Modafinil, sancionado a mediados de febrero y en espera del contranálisis, amenaza su carrera definitivamente.

"Por ahora no hay nada. Cuando salga el castigo o el no castigo, hablaré. La noticia ya salió y ahí está, el resto... veré qué hago", dice Burmann, cortante, mientras pedalea por alguna ruta del país para no perder ritmo, según relata a La Tercera. El ciclista agrega escuetamente: "En estos momentos estoy haciendo los trámites que cualquier persona en esta situación haría. No hemos terminado de presentar los papeles". Lobito no quiere comentar si apelará a su inocencia o a algún atenuante que rebaje su sanción.

La situación es extraña. Su último equipo, el Kuota-Construcciones Paulino de España anunció a través de su cuenta oficial de Twitter un día antes de que se hiciera pública la suspensión de su licencia, que "no será más parte del equipo". Así, a secas.

La sensación es que en el team hispano optan por el silencio y no quieren involucrarse en este positivo. "Yo no puedo decir que sí o que no, porque yo ya tampoco estoy en el equipo", comenta en España su ex compañero, el chileno Elías Tello.

"La única forma de comunicarme con él ha sido por messenger", explica Isaac Cantón Serrano, el director deportivo del equipo en el que Lobito Burmann llegó a ganar la Vuelta a León el año pasado. "Ni él ni yo estamos ya en el equipo, que ahora dirigen otras personas. Eso no quita que me haya sorprendido su positivo y que le haya preguntado qué pasó. Lo único que Lobito me contestó es que ingirió esas sustancias para estudiar, no para doparse".

El ciclista estudia nutrición, el año pasado estaba en segundo año y lo compaginaba con sus carreras ciclistas. Sus compañeros reconocían que iba acompañado a las competencias y a las concentraciones con libros. "Nosotros en el equipo estábamos al margen de toda sustancia dopante", explica Cantón Serrano. "De ahí que esto que ha sucedido me haya sorprendido a mí tanto como ustedes. Pero yo no les puedo decir más".

Burmann no confirma la teoría de que tomó alguna sustancia que lo ayudara a estudiar. "No sé de dónde sacan eso. No voy a decir nada de eso, ni si tomé o no tomé algo. ¿El técnico español? Dejé de hablar con ellos desde que pasó todo esto, ellos no saben nada", afirma el sancionado ciclista.

En Chile, su ex entrenador y amigo, Arturo Corvalán, asegura que Lobito está en un período reflexivo: "Me comunico casi todos los días con él, pero hace dos años que no trabajamos juntos".

El resultado del análisis se guardó durante mucho, aunque en el ciclismo todos lo conocían. De hecho, ni siquiera el encargado de dopaje en el Comité Olímpico de Chile sabía de la noticia hasta ayer. "Es algo triste, porque en él teníamos esperanzas olímpicas", aseguraron desde el ente.

En la Comisión Nacional de Control de Dopaje, eso sí, estaban al tanto de la situación, aunque no la publicaron. "No pudimos hacerlo porque la muestra y la sanción la entregó la UCI. Ellos están por sobre nosotros cuando el evento lo organizan ellos, como fue en este caso", explica Roberto Dagnino, director ejecutivo de la entidad.

Miguel Vidal, gerente técnico de la Federación Ciclistica de Chile, lo confirma: "Fue la UCI la que nos informó a nosotros, y nosotros a la Comisión. Cuando nos avisaron, dimos aviso".