Diego Buonanotte: "Es lindo que me voten los colegas, eso lo hace más meritorio"

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El torneo de Buonanotte. Así puede quedar denominado para siempre el Apertura 2016 que recién temina. Así debe quedar guardado. Su irrupción fue decisiva en la conquista del título de su equipo, Universidad Católica, y sus maniobras fueron las más aplaudidas por los aficionados. Talentoso, eléctrico, creativo, escurridizo, inspirado, asociativo, genio. Un futbolista para elevar el nivel de un campeonato. El mejor futbolista de la liga. Así se lo han reconocido sus propios pares, según se refleja en la encuesta que La Tercera, como cada semestre, ha realizado entre los capitanes y entrenadores de los 16 equipos participantes. Y ahí el triunfo de Diego Buonanotte (28 años) ha sido abrumador. El futbolista por lejos más votado, el mejor extranjero, el mejor volante. Buonísimo.

Dos veces campeón con la UC (Apertura y Supercopa) con un rendimiento individual descollante. Y aunque no tuvo un inicio fácil, con una expulsión a los ocho minutos de su debut con la camiseta cruzada, terminó en héroe y reconocido. El ganador de la encuesta de los mejores. Con ese rótulo a cuestas, con la alegría del título obtenido aún a flor de piel y a punto de embarcarse a sus merecidas vacaciones, Buonanotte acepta el diálogo con El Deportivo. A la vuelta de sus vacaciones recogerá el galardón.

¿Cómo se recibe ser el más reconocido y votado por los de su propio gremio, los capitanes y entrenadores de los equipos?

Me pone muy contento, con mucho orgullo de haber podido lograr este premio.

¿Es más valioso por tratarse de pares?

Es lindo que me voten los colegas, que puedan hacerlo. Eso habla bien y lo hace más meritorio. Me pone más contento aún.

¿Se esperaba un semestre así cuando decidió llegar a la UC?

Cuando uno llega a un club lo hace con expectativas, pero tampoco es que uno llegue y diga así como así 'voy a salir campeón, voy a ser goleador, voy a dar tantos pases', pero la verdad es que este semestre se dio todo: el bicampeonato y la Supercopa, que al final son cosas muy lindas para uno.

¿Por qué cree que se le dio todo de forma positiva?

Es que cuando lo grupal anda bien, las individualidades se notan y resaltan más porque hay confianza. El equipo se entendía, Mario (Salas) sabía dónde y cuándo jugar con la motivación. Aquí también rescato la unión del grupo, el esfuerzo y el trabajo constante.

¿El episodio con Esteban Pavez alcanzó a empañar en algo su semestre?

Se superó enseguida por el cariño de toda la gente de la UC; sus dirigentes, jugadores, los hinchas, todo el cariño. Fue por la ayuda de todos y por eso estoy muy agradecido.

¿Es su mejor torneo desde que salió de Málaga?

No sé si en lo futbolístico es el mejor, porque sé lo que puedo dar, sé que puedo mejorar y tengo que hacerlo. Pero en lo personal, en lo humano, es uno de los mejores momentos desde hace mucho tiempo. Y cuando uno se siente así, está con ganas día a día de meterle intensidad y eso es lindo, porque después se refleja en la cancha.

¿Sabía que es su semestre con mejor promedio de goles?

Siempre me gustó meter goles, llegar al área más allá de mi puesto. Si me tengo que tirar para un lado, te digo que lo mío es más meter goles que organizar. Me siento más cómodo y está bueno ese dato que me comentas. Ahora el semestre que viene, eso sí, con lo que dices me tengo que superar, me la pusiste difícil.

No es común que los refuerzos anden todos parejos y en la Católica se dio...

Es que creo que eso viene por la base de jugadores y el equipo que había. Así es fácil adaptarse. Si pudimos es por la calidad que hay, tanto humana como profesional. El camarín también ayuda muchísimo y se lo debemos a todos los jugadores. Te contaré algo: la noche de la celebración (Enzo) Kalinski dijo que él sentía que nos conocíamos de toda la vida.

¿Qué lugar ocupa Universidad Católica en su carrera?

Hoy, mucho. Encontré mi lugar. Hacía mucho tiempo no lo encontraba. No podría estar en otro equipo tan cómodo como acá. La vida en Chile me encanta, su calidad, el respeto, la calidad humana. Más allá de ese episodio (con Pavez), en la calle me agradecen y me tratan muy bien, y no sólo los hinchas de Católica. Estoy cómodo y mi familia también. El club me hace súper feliz y hoy, Católica ocupa un porcentaje muy grande en mi vida y en mi carrera.

Desde Argentina han dicho que lo quieren repatriar, ¿usted está tan a gusto como para asegurar que se queda en la UC?

Sí, me han preguntado en otros lados por lo mismo, pero estoy cómodo y no se me pasa por la cabeza algo así.

¿Le gustaría extender más que los dos años que tiene de contrato su estadía en San Carlos?

Me encantaría, por lo que te decía: estoy cómodo. A lo mejor el dinero en mi vida hoy no es prioridad, sí el bienestar y el día a día de mi familia. La verdad, me encantaría poder quedarme muchos años.

A usted lo han dirigido diversos entrenadores, ¿qué tiene de especial Mario Salas?

Vive de una manera muy apasionada, me gusta mucho su estilo, su forma de ver el fútbol, de vivirlo, de querer ganar, de no relajarse, de progresar. Lo que más me sorprendió es su calidad de persona, que es muy humano. Porque hoy en día mis últimas experiencias me dijeron que va todo bien, pero si es que haces las cosas bien como jugador. Mario estuvo en los momentos duros y más delicados, siempre con una palabra de apoyo, un consejo y a eso a mí me ayuda muchísimo.

¿La UC debe dar el salto internacional?

Sí, tenemos equipo y nos vamos a preparar con mucha ilusión y fuerza, para hacer torneos buenos a nivel local e internacional. Es importante para todos y genera ilusión. Eso sí, no puedo asegurar si vamos a hacer las cosas bien o mal, no tengo una bola mágica, pero sí que vamos a dar pelea. Van a haber algunos cambios seguramente, pero a pesar de eso este equipo va a seguir dando pelea. Ahora toca descansar y recargar pilas.

¿El tricampeonato es posible con la Copa Libertadores de por medio?

Vamos a ir por eso, porque somos un equipo grande. Vamos a ir a pelear todo, vamos a ilusionarnos con eso.

¿Tiene claro que por el año hecho son los principales candidatos?

Sí, bueno, a uno siempre lo ponen como candidato cuando es campeón. No nos tiene que generar nada, somos grandes y debemos asumir esa responsabilidad.

¿Les pesa o molesta el mote de favoritos?

No es lindo, porque a nadie le gusta sentirse candidato, pero sí asumir la responsabilidad, porque es lógico que te tengan de candidato.

En esta misma encuesta a un compañero suyo lo eligieron mejor delantero, ¿Será difícil reemplazar a Nico Castillo?

Un jugador de esa calidad es difícil reemplazarlo, pero el futbol es así. Nico tiene un futuro enorme, creo que va a ser un supergoleador en todos los equipos donde vaya y también para el fútbol chileno. De corazón le deseamos lo mejor en todo lo que haga.

Con él se entendieron a la perfección.

Ahora él me tendría que llevar adonde vaya (risas)… muchos de los goles míos fueron gracias a él, pero hay que cambiar rápidamente el chip y tratar de adaptarnos a una Católica sin el Nico Castillo.

Aparte de él, ¿cree que Universidad Católica necesita mucho retoque para enfrentar la Copa?

No soy quién para opinar, yo sólo soy uno más del equipo. Para eso hay gente que se ocupa, está el Tati, ellos son los encargados.