José Luis Domínguez, director de orquesta: "El concierto en Frutillar refleja la madurez de la Orquesta Juvenil"

Es una de las piezas más complejas de la historia de la música. Las innovaciones de ritmo y armonía con que el ruso Igor Stravinsky dotó a la partitura de La consagración de la primavera, revolucionaron su época y muchos de los que la escucharon por primera vez en 1913, en París, se abrumaron tanto que decidieron irse de la sala. Incluso hoy, el desafío es grande, por eso esta noche, el público que asista a ver la interpretación de la Orquesta Sinfónica Nacional Juvenil, a las 20 horas, en el Teatro del Lago, debe saber que se enfrenta a un momento especial. "Para una orquesta joven es impensable abordar esta pieza y este concierto en Frutillar refleja su maduración. Con los jóvenes, estuvimos retirados ensayándola en enero y la verdad es que a muchos de ellos todavía les queda grande. Quise tomar este reto porque es el momento de crecer, hay que atreverse a hacer historia y el público se sorprenderá", dice el director José Luis Domínguez, quien además esta noche abordará piezas de autores latinoamericanos, como Luis Advis y el mexicano Arturo Márquez.

Desde 2003, Domínguez es director residente de la Filarmónica de Santiago y en paralelo lidera la agrupación de 74 jóvenes, entre 18 y 24 años, becados por la Fundación de Orquestas Juveniles e Infantiles que preside Cecilia Morel y dirige Maritza Parada, la que funciona a lo largo del país. "Tengo mi orquesta profesional, pero dirigir a jóvenes es devolverle a mi país todo lo que me ha dado", dice. En 2012 los llevó a su primera gira internacional por Europa y este año, el director quiere hacer más cambios: renovar el plantel de Santiago, incluyendo a músicos de otras ciudades. "Las orquestas juveniles en regiones son más nuevas, pero ya he visto muchísimo talento y quiero hacer cambios en esa dirección. La orquesta nacional debe abrirse para que en las giras internacionales o en conciertos importantes como este de Frutillar, puedan estar los mejores talentos del país", dice.

¿Hará una convocatoria nacional?

Es la idea. Es fundamental romper barreras. Vi una fila de violas en la Orquesta del Biobío que era fantástica. ¿Por qué no pueden tocar en Santiago? Tenemos becados en todo Chile y creo que merecen tener la oportunidad de estar en los momentos estelares de la orquesta. Vivir en región no puede ser impedimento y al mismo tiempo eso hará que los chicos de Santiago no se duerman en los laureles. Habrá una mayor competencia.

El mismo proviene de región. Nacido en La Serena, en 1971, Domínguez ha hecho una carrera brillante. Se formó en violín en el Instituto de Música de la UC y a los 21 años comenzó a dirigir profesionalmente. En 2010 abrió con éxito la temporada del Teatro Colón en Buenos Aires y ha sido invitado a dirigir a España, Alemania, Perú, Colombia y Centroamérica. Una de sus especialidades es la dirección de ópera. Mañana hará gala de eso en Frutillar, con la Sinfónica Juvenil y el prodigioso tenor coreano de 26 años, Myonhyun Lee, interpretando óperas de Puccini, Verdi y Wagner. Domínguez también es experto en Beethoven y en marzo abrirá la temporada de conciertos del Teatro Municipal con las Novena Sinfonía.

¿Cómo le gustaría continuar su carrera?

Acabo de aceptar dirigir la Orquesta Filarmónica de Colombia, con sede en Bogotá, y la verdad es que tengo más ofertas internacionales. Por ahora, tengo compromisos aquí. Siento que la Filarmónica se consolidó y está a un paso de ser una orquesta clase A. Con la Sinfónica Juvenil estamos abriendo un nuevo ciclo y sólo puedo decir que quiero dejar la mayor cantidad de cosas sembradas antes de tomar otro camino.