Las novedades se imponen una vez más en televisión

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Los Globos de Oro dejaron clara su apuesta por las sorpresas y los ganadores primerizos: The Night Manager se llevó tres estatuillas, y The Crown le siguió con dos.




Una de las críticas más comunes a los premios Emmy -el máximo galardón de la televisión norteamericana- es lo predecible que pueden ser, soliendo premiar a favoritos de siempre, que acumulan estatuillas en las mismas categorías año a año. Eso no se puede decir de los Globos de Oro. Por lo menos en sus ediciones recientes, la prensa extranjera de Hollywood ha dejado claro que sus preferencias están en las novedades, y en jugar con los ganadores inesperados, una realidad donde cuesta establecer favoritos.

El primer premio de la noche dejó en claro la tendencia, cuando Billy Bob Thornton ganó Mejor Actor en Serie Dramática gracias a su rol en Goliath, drama legal estrenado en octubre por Amazon, dejando en el camino a favoritos como Bob Odenkirk de Better Call Saul y Rami Malek de Mr. Robot. Luego, The Crown, la serie de Netflix sobre una joven Reina Isabel II, daría una de las grandes sorpresas de la noche, triunfando en Mejor Actriz en Serie Dramática (para Claire Foy) y en Mejor Serie Dramática, superando a Game of Thrones y el fenómeno de 2016, Stranger Things.

Ni si quiera la gran ganadora de los Emmys en septiembre, American Crime Story: Todos vs OJ Simpson, pudo repetir todos sus triunfos en los Globos de Oro. Si bien se quedó con Mejor Miniserie y Mejor Actriz de Miniserie (para Sarah Paulson), la miniserie The Night Manager de AMC daría la sorpresa quedándose Mejor Actor de Miniserie (para Tom Hiddelston) y con las dos categorías secundarias de actuación, con Olivia Colman y Hugh Laurie. Este último aprovechó de burlarse de la inminente presidencia de Donald Trump. "Puedo decir que gané en los últimos Globos de Oro de la historia. Piénsenlo, tienen las palabras 'Hollywood', 'prensa' y 'extranjeros' en el título", dijo provocando las risas de los presentes.

La comedia no fue la excepción de la tendencia, celebrando de paso la diversidad racial en la pantalla chica. Tracee Ellis Ross triunfó como Mejor Actriz en Serie Cómica con Black-ish, en su primera nominación tras tres temporadas al aire y siendo la primera actriz afroamericana en ganar la categoría en más de 30 años. "Esto es para todas las mujeres de color, cuyas historias no siempre son consideradas: Las vemos, yo las veo", dijo la actriz en su discurso. Por su parte, Atlanta, serie enfocada en la cultura hip hop de la ciudad del mismo nombre en Estados Unidos, y que se transformó en una de las debutantes más aclamadas del año, triunfó en Mejor Serie Cómica y Mejor Actor en Serie Cómica, para su creador y protagonista, Donald Glover.

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