Los proyectos que Seymour Hoffman dejó en el tintero

La claqueta de Philip Seymour Hoffman cerró este domingo el dolido final de su turbulenta vida. Una aparente sobredosis -la cual podría ser confirmada dentro de los próximos días tras la autopsia que comenzó ayer- liquidó al actor de 46 años y, junto a él, los proyectos que tenía a futuro.

El primero de ellos era la cuarta entrega de la exitosa saga Los juegos del hambre, en la que Seymour Hoffman interpretaba a Plutarch Heavensbee. Si bien faltan por rodar las últimas escenas, los productores de la película aseguraron que el proyecto continuará de todos modos, pese a un leve cambio de estructura.

Además, el actor de Boogie Nights participaba en la nueva serie de televisión Happyish, cuyo piloto alcanzó a ser grabado. En el episodio interpretaba a un autodestructivo publicista.

Su tercer y último proyecto era la dirección de su segundo filme tras Jack Goes Boating. La cinta se iba a llamar Ezekiel Moss y sería protagonizada por Jake Gyllenhaal y Amy Adams. Era la historia de amor entre una viuda de pueblo y un médium.

Además de la tercera parte de Los juegos del hambre, cuyo rodaje alcanzó a ser terminado hace un par de semanas, otra película será estrenada comercialmente tras exhibirse en el Festival de Sundance: A most wanted man, basada en la novela de John LeCarré y dirigida por Anton Corbijn.

Entre las celebridades que ayer manifestaron su pesar destaca Robert de Niro, que actuó con él en Nadie es perfecto (1999). "Era un actor maravilloso. Este es uno de esos momentos en el que dices: 'Esto no debería haber pasado'. Era tan joven, tenía tanto talento y tanta vida por delante".

Heroína y fentanilo

Alrededor del cadáver del actor de Capote, desparramados sobre el piso del baño en el que su amigo, el guionista David Bar Katz, lo encontró el pasado domingo, había varios sobres vacíos y dos que, aparentemente, podrían haber contenido heroína. Al hallazgo, se sumaron luego 49 dosis de la misma droga, 20 jeringas, medicamentos expelidos sólo con receta y más sobres vacíos. Se especula que aquellos medicamentos corresponderían a fentanilo, un analgésico casi 30 veces más poderoso que la morfina.

Las últimas imágenes de Seymour Hoffman con vida fueron tomadas el día 30 de enero en un bar de Atlanta, y lo muestran vestido con un chaleco verde y un jockey negro.