Matías Campos Toro: "He encontrado mi verdadera identidad"

Matías Campos Toro. ¿Así le gusta que le llamen, con todas las letras?

Así es. No es compuesto, pero así me gusta que me digan a mí.

Suena más a nombre de noble que de futbolista...

Bueno, eso se dio porque acá había otro Matías Campos y coincidimos en un partido y yo quedé como Matías Campos Toro. Pero después me siguió gustando. Ahora es más que nada un homenaje a mi madre.

¿Y a quién homenajea celebrando los goles como un pirata?

Es una historia larga. Partió con mi señora, cuando éramos novios. No tenía celebración y en un momento me pilló una racha de bastantes goles. Y estaba en esa época Piratas del Caribe y a mí me gustaba mucho el personaje de Johnny Depp, así que decidí empezar a festejar tapándome un ojo.

Su salto al fútbol europeo se produjo pronto. ¿Demasiado?

No, no tan pronto, a los 22. Lo que pasa es que mi carrera se inició muy rápido. Yo llegué a Audax con 13 años y a los 16 debuté en Primera, así que me salté muchas etapas.

¿Por qué cree que el jugador chileno emigra tan joven?, ¿el nivel del torneo es tan bajo que no le permite a uno desarrollarse?

En mi caso porque Audax es un club que se caracteriza por la venta de jugadores. No tenemos 50.000 socios y la manera de sobrevivir del club es ésa. Yo ya había tenido participación en la Selección adulta y creía que era el momento de dar el salto.

¿Hoy se arrepiente?

No lo sé. En la vida se dan oportunidades y hay que aprovecharlas. A mí me encantó viajar, vivir nuevas experiencias. Era mi sueño jugar en la Serie A y lo cumplí. Después surgieron otros desafíos y traté afrontarlos de la mejor manera.

¿Fracasó en el fútbol europeo?

Yo creo que en España sí fracasé. En Udine iba muy bien y tuve decisiones que no fueron acertadas, pero tampoco me arrepiento. La vida se hizo para aprender y estoy feliz en este momento. No me reprocho nada. Todo lo que hice lo disfruté al máximo.

Toda una filosofía de vida.

Sí. ¿Te gusta?

Suena bien, pero al final decidió regresar. ¿Por qué?

Porque necesitaba volver al lugar de donde yo salí. Pude ir a otros lugares, me ofrecieron otras cosas, pero sentía que tenía volver al lugar donde me formé como jugador y como persona. Decidí volver porque aquí tenía las puertas abiertas.

Muchas veces, cuando uno vuelve a casa y no es para retirarse parece que casi tuviera que hacerlo con la cabeza gacha.

Muchos lo ven así, pero yo pienso totalmente distinto, no lo veo como un paso atrás. Yo vuelvo a casa porque siento que le tengo que devolver mucho a Audax. Es una responsabilidad muy bonita haber vuelto. Ahora soy un referente del club y tengo que ser también un buen líder para el grupo.

¿Le molesta que hablen más del gran proyecto que fue que del jugador que es hoy en día?

No, no me molesta. Cada uno tiene su pensamiento. Muchas veces la gente habla, pero no sabe tu historia. Es muy fácil criticar así, pero las críticas igual te sirven.

Es usted un zurdo de esos que escasean. Una especie de Jean Beausejour, por buscar una analogía. ¿Cabe esa comparación?

Sí, claro, Beausejour es un muy buen jugador y lo ha demostrado. Y es cierto que escasean los zurdos, por eso uno trata también de mostrarse, para destacar y en algún momento poder volver a la Selección. Tengo 27 años, me queda bastante fútbol para demostrar.

¿Para cuándo otro llamado?

Yo soy muy competitivo, pero hay que estar con los pies en la tierra, tampoco puedo imaginarme cosas que no son. Haciendo fecha a fecha buenas actuaciones, en algún momento podrá llegar.

¿Cómo ha podido cambiar tanto su equipo en tan poco tiempo?

Trabajo, humildad y una buena pretemporada.

¿Quién es el favorito hoy?

¿Favorito?, nosotros. Para mí, vamos a ser siempre los favoritos.

¿Da más miedo este Audax que antes o es la U la que da ahora mucho menos miedo?

¿Miedo porque somos más feos?

Eso no voy a responderlo yo.

No, nosotros estamos haciendo muy buenos partidos, intensos, y si hacemos las cosas como tenemos que hacerlas, tiene que darse bien.

Insisto en la pregunta. ¿Infunde esta U menos respeto?

No, siempre hay un respeto, con cualquier equipo, no se puede subestimar a nadie. Pero es un respeto con límites. Lo respetamos, pero vamos a salir a ganar el partido.

¿Y usted da más miedo ahora o cuando se marchó a Europa?

Ahora hay un tipo que tiene mucha más experiencia. He encontrado mi verdadera identidad. En estos momentos me siento mejor que antes.

¿Bajarán una estrella este semestre? Son ya 60 años esperando.

Ése sí que es realmente un sueño para mí, darle una estrella a Audax Italiano después de tantos años