Ministros tienden puentes con figuras DC en inédita cita
Hinzpeter, Chadwick, Bulnes y Larraín cenaron el sábado con Pizarro, Patricio Walker, Burgos y Latorre, entre otros. <br>
"¿Tú crees que debo ir al asado de Jorge Pizarro?", preguntó el mediodía del sábado, por teléfono, el ministro de Educación, Felipe Bulnes, al senador RN Alberto Espina.
Ambos estaban a menos de dos metros de distancia en el salón plenario del Congreso, durante el consejo general de RN, y se rieron a carcajadas al darse cuenta. "Anda, estas cosas sirven para mejorar las confianzas", fue la respuesta, ya frente a frente, de Espina.
La idea de un asado había nacido como una apuesta futbolística hace semanas entre Pizarro, senador DC e hincha de la UC, y Espina, fanático de la "U". Quien perdiera el campeonato nacional pondría su casa. Bulnes, de hecho, había sido el "ministro de fe" de la apuesta.
Según dicen varios de los asistentes, en medio de la conversación informal se abordó el conflicto estudiantial y la agenda de reformas políticas.
En el gobierno decían ayer que una instancia de este tipo, en que se conversara de política con figuras opositoras en un contexto informal y reservado, no se había dado desde el inicio de la administración de Sebastián Piñera. La cita del sábado coincidía, además, con el cambio en el clima tenso que crispado que había hasta antes del accidente en Juan Fernández.
Los invitados fueron definidos por Pizarro y Espina en los últimos días, de entre varios hinchas de la UC y la "U". Así, a las 19.30 horas del sábado llegaron también a la casa de Pizarro en La Dehesa los ministros Rodrigo Hinzpeter (Interior), Andrés Chadwick (Segegob) y Felipe Larraín (Hacienda), el senador DC Patricio Walker y los diputados DC Jorge Burgos y Juan Carlos Latorre.
También asistieron el timonel UDI, Juan Antonio Coloma; el abogado y estrecho amigo de Espina y del Presidente Sebastián Piñera, Carlos Zepeda; el ex senador PS Carlos Ominami y el socialista y presidente de la UC, Jaime Estévez.
El diálogo comenzó en torno al fútbol. Pero, a poco andar, Bulnes comentó con algunos de los presentes la mayor complejidad de la cartera de Educación, versus la que tenía hasta hace unos meses en Justicia.
El secretario de Estado también explicó que el gobierno está intentando instalar una mesa de diálogo con los estudiantes. Pero que si eso fracasaba, el Congreso será el lugar de la negociación y que, en ese contexto, la Alianza y la Concertación deberán asumir la búsqueda de acuerdos. "No hubo una petición directa, pero se entendió el mensaje", dijo un personero opositor que estuvo en la cita.
Otro de los invitados destacó que Bulnes valoró la camaradería de la reunión.
"Fue una conversación informal interesante, un intercambio de opiniones sobre temas relevantes que luego se pueden usar en conversaciones formales. Fue un encuentro súper positivo", indicó el diputado Latorre.
Hoy, la Confederación de Estudiantes Universitarios entregará al gobierno una contrapropuesta, con nuevas condiciones para instalar la mesa de diálogo promovida por el Ejecutivo (ver nota secundaria).
Sistema binominal
Según algunos de los asistentes, la conversación se extendió hasta cerca de la medianoche. Como una instancia informal, los diálogos a veces derivaban en pequeños grupos.
Así, en medio de la carne, las empanadas, las ensaladas y el vino, Chadwick abordó con parlamentarios opositores la ronda de reuniones de La Moneda con los partidos por reformas políticas.
El ministro vocero de Gobierno habría planteado que la crispación del escenario político y social hace necesario el diálogo político. Y, en esa línea, habría planteado que el gobierno no tiene previsto excluir temas de la propuesta de reformas políticas que realizará en las próximas semanas (aún resta una cita entre los ministros políticos y la directiva de la UDI).
Aunque en el entorno de Chadwick descartan que él haya dicho que habrá una propuesta específica para cambiar el binominal, algunos asistentes indicaron que el mensaje fue entendido en esa línea.
En todo caso, uno de los presentes resume que para la reunión fue para la DCuna señal "potente", porque estaba casi todo el comité político -excepto el titular de la Segpres, Cristián Larroulet- en casa de uno de los senadores "más duros con el gobierno". Para Espina, en tanto, "fue una reunión de amistad cívica, donde hablamos de lo humano y lo divino, y donde Pizarro honró su palabra y pagó su apuesta"
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