Ortega rinde homenaje a Chávez y promete continuar con filosofía del ALBA
El presidente de Nicaragua señaló que seguirá "luchando para no traicionar a Chávez, levantando esas banderas de la libertad, la justicia, la paz y la unidad latinoamericana y caribeña".
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, rindió un homenaje póstumo a su aliado y homólogo de Venezuela, Hugo Chávez, y, en su memoria, prometió continuar "luchando" por la unidad latinoamericana y caribeña, y la filosofía de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América (ALBA).
"Le decimos al hermano pueblo venezolano que estamos entregados de lleno con la fuerza de nuestro espíritu, de nuestra acción, a seguir librando esta batalla, darle continuidad a los sueños de (Libertador Simón) Bolívar (...), a los sueños de Hugo Rafael Chávez Frías", declaró en un discurso el mandatario nicaragüense, desde la Plaza de la Revolución, en Managua.
Ante una audiencia integrada por diplomáticos de los países miembros del ALBA, trabajadores del Estado, mandos militares y policiales, Ortega aseguró que seguirá "luchando para no traicionar a Chávez, levantando esas banderas de la libertad, la justicia, la paz y la unidad latinoamericana y caribeña".
El líder sandinista comentó que no fue casualidad que Chávez haya nacido en el mismo país que Bolívar, y se animó a "decirle a Bolívar, 200 años después, que aró en tierra fértil, en el corazón de nuestros pueblos".
"Nicaragua ha sido tierra fértil todo el tiempo. No podía estar ausente en estos nuevos tiempos", añadió.
Ortega también aseguró que su fallecido homólogo venezolano le tenía "cariño a los nicaragüenses" y ese sentimiento fue recíproco hasta el anuncio de su muerte.
"Desde ese mismo momento, este libertador, Hugo Rafael Chávez Frías, estaba trascendiendo con mayor fuerza e iluminando con una luz mucho más intensa, como suelen hacerlo los héroes, los próceres, los libertadores", resaltó.
Asimismo, le envió su solidaridad y condolencias a la familia del mandatario venezolano, en un acto transmitido por cadena obligada de radio y televisión.
En un discurso inusualmente corto, y bajo una fotografía gigante de Chávez con las manos juntas en gesto de reverencia, Ortega cerró gritando "¡Que viva la revolución bolivariana!, !Qué viva el comandante Hugo Chávez!, ¡Sandino vive, Chávez vive, Chávez vive!".
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