Pietro Hernández Pascualetti: "No es que Chile sea más corrupto, sino que el país hoy está investigando todo"

Con la presencia del ministro del Interior, Jorge Burgos; del director general de la PDI, Héctor Espinosa; y del fiscal nacional, Jorge Abbott, ayer se inauguró la Brigada Investigadora de Delitos Funcionarios (Bridef), que indaga ilícitos de corrupción pública. Durante la ceremonia, el prefecto Hugo Pérez, jefe Nacional de Delitos Económicos de la PDI, explicó que “en los ilícitos de corrupción la PDI aporta cerca del 90% de los informes periciales e investigaciones que elabora por delegación del Ministerio Público”.

Tras ello, el subprefecto jefe de la brigada, Pietro Hernández, quien lleva 12 años investigando ilícitos tributarios y funcionarios, además de hacer clases para la Academia Internacional para el Cumplimiento de la Ley (ILEA) en Estados Unidos, detalló cuáles son las casos que hoy tienen a cargo junto a otros 17 policías y las principales dificultades al indagar este tipo de ilícitos.

¿Con qué objetivo se crea esta brigada?

Esto fue una visión mandos los superiores y parte en la Brigada de Delitos Económicos Metropolitana, que es donde siempre se han visto los delitos de corrupción pública. Sin embargo, se necesitaba, por especialización y cantidad, concentrarse solo en una subdivisión.

¿Cuáles son los casos que está viendo esta unidad aparte de los de presunta corrupción política y respecto del patrimonio de Fuente-Alba?

Quiero hacer una aclaratoria, lo que estamos analizando es el tema del Ejército, que el comandante en jefe haya sido el señor Fuente-Alba (en ese período) es algo que se está viendo, pero la investigación tiene que ver con el tema la defraudación a través de los dineros que entran por la Ley de Reserva del Cobre desde 2010 a 2014. Los otros casos que se están indagando son: SQM, Penta, Corpesca y la nueva arista que tiene que ver con el arriendo del avión de Marco Enríquez-Ominami, ahí estamos trabajando con el fiscal Ximena Chong.

¿Cuáles son los obstáculos más comunes a los que se enfrentan en la mayoría de estas investigaciones, en el sentido de recopilar información o tomar declaraciones?  

Las vallas más significativa son dos: una es el tema del secreto bancario, debido a que es importante contar con información de las cuentas corrientes, sobre todo de las empresas, que es donde se triangulan los dineros. Y la otra, es que muchas veces nos encontramos con la prerrogativa que tienen los imputados de guardar silencio. Entonces, si sumas por un lado que no encuentras las evidencias y no cuentas con la declaración del imputado, te encuentras con un candado difícil de abrir.

¿Han recibido algún tipo de presión al momento de indagar a personas de altos cargos públicos, como parlamentarios, ex presidentes o generales en retiro?

No, nunca hemos recibido algún tipo de presión. Creo que hoy los poderes están bastante separados, y el que el Ministerio Público sea autónomo es una fortaleza en estos momentos, entonces, bajo ese prisma, no hemos sentido esa presión que puede burlar alguna investigación.

¿Cree que hoy hay más corrupción en Chile?

Los delitos de corrupción siempre han existido, más o menos, eso va a depender de ciertas épocas que se dan. Respecto a su pregunta, si esto hoy es mucho más que antes, podría decirle que a lo mejor no en cantidad, pero suena más porque la cantidad de casos donde hay personas importantes involucradas se juntaron. Tenemos una concentración de cuatro o cinco casos donde hay organismos y empleados públicos que tienen cargos importantes, donde quizás la defraudación es cuantiosa y eso hace que hoy aparezca que estamos como un país más corrupto.  No es que Chile sea más corrupto, sino que el país está investigando todo, hay una posición de mayor transparencia.