PSU 2014: expertos valoran anuncios, pero advierten que cambios "no son suficientes"

<p class="bullet">La inclusión del aviso oportuno de las resoluciones del Consejo de Rectores y la importancia de una nueva institucionalidad son las modificaciones que faltan agregar al proceso de admisión.</p> <p class="bullet">Ayer el Consejo de Rectores anunció que se harían variar los puntajes por notas en hasta 10 puntos.</p>




Hay sólo un acuerdo entre los expertos respecto a las novedades que dio a conocer ayer el Consejo de Rectores sobre el próximo proceso de admisión 2014 a las universidades: El ranking ayuda a nivelar la cancha. Sin embargo, hay muchos aspectos al debe que se necesitan mejorar.

"El tema fundamental es que es necesario abrir el espectro de cómo un estudiante entra a la universidad. El ranking permita esa apertura, pero falta", afirma la experta en PSU y académica de la Facultad de Educación UDP, Ruth Arce.

El problema es que se deben incorporar nuevos elementos. "Yo voto por perfeccionar el sistema, agreguemos el ranking, pero agreguemos otras cosas, como el portafolio, lo que el estudiante ha hecho en su vida escolar, cómo participa de las actividades del colegio, no es sólo un reflejo de notas", sentencia la académica.

"Seguimos con un sistema de selección universitaria que hay que repensarlo. Estamos seleccionando con el mismo método a un médico que a un actor, desconociendo que el país tiene un conjunto de necesidades y las personas tienen capacidades distintas y hay que buscar la manera de darle peso a esas cosas", dice el decano de la Facultad de Educación de la U. Alberto Hurtado, Juan Eduardo García Huidobro.

Es más, para el experto, "hay que valorar otros aspectos más allá de la trayectoria escolar, no solamente notas, sino que actividades sociales, liderazgos, que hizo en trabajo social, el deporte, tenemos que ir a un sistema de más colores, no tan simple".

Para el académico de la U. de Chile David Bravo lo que se necesita es una nueva institucionalidad. "Tener un organismo claramente encargado a nombre del Consejo de Rectores con las competencias apropiadas, los tiempos necesarios, los recursos y los estudios con las fronteras muy demarcadas en lo que respecta al Demre y sui vinculo con el Ministerio de Educación, además de una agenda de perfeccionamiento a partir de lo que fue el informe Pearson", indicó.

En tanto, Arce, ve el panorama más complejo. "Los cambios no resuelven el tema de la calidad educativa de los estudiantes. Hay un concepto complicado de nivelar la cancha, no se debería nivelar, debería estar nivelada. Lo que deberíamos esperar es que el sistema educativo, independiente de la dependencia, entregue las mismas herramientas, para que en igualdad de condiciones, los jóvenes por sus capacidad opten a la educación superior", aseguró.

A DOS MESES DE LA PSU

Si bien los expertos coinciden en la implementación del ranking, surgen las críticas de si fue oportuno el anuncio a dos meses de la PSU. "El clima complejo tiene que ver cuando se entrega la información. Un estudiante espera que este proceso esté informado de manera muy anterior, muy conocido y que esos cambios no se entreguen cuando falta poco tiempo para la prueba", aseguró Arce.

Opinión que no comparte Bravo, quien afirma que "mi interpretación de que las universidades hayan ajustado la ponderación es algo que está perfectamente entre las reglas regulares". Esto, porque "es un cambio que se implementó el año pasado y como es tradicional, las instituciones informan en octubre, el valor y las ponderaciones", explicó el experto.

García Huidobro, en tanto, señala que los cambios "van en la dirección correcta, son democráticos e interesantes, ya que están avalando un conjunto de antecedentes de los estudiantes muchísimo mas serios, permanentes y rigurosos que la PSU".

Pero para la académica, "un estudiante que está en la enseñanza media, en tercero y cuarto medio, es un alumno que necesita relativas certezas, y esas certezas le entreguen tranquilidad".

Una idea que comparte el ex integrante del comité técnico de la PSU, Jorge Manzi. "El ideal es que se hagan todos los esfuerzos para adelantar las fechas de aquello que se pueda adelantar". Pero advirtió, se trata de "un año de transición". Esto, porque dadas las evaluaciones internacionales, "se estableció una agenda de cambios, que abarcaba varios años y se definió que los cambios no se podían completar en un año", agregó.

De hecho, Arce reconoce que "el Consejo de Rectores no podía hacer un cambio si no sabía cómo había funcionado el ranking en el primer semestre".

LO QUE VIENE

Importante es saber que los cambios no terminarán este año, como señaló Manzi. "Vienen modificaciones especialmente las que tienen que ver con las pruebas, también se va a eliminar el descuento de las respuestas incorrectas el próximo año y se anunció que todas las pruebas tendrán preguntas adicionales (5) para chequear como funcionan", afirmó.

Pero no es todo. "Se vienen cambios que no tienen consecuencias para los examinados, como la incorporación de la teoría alternativa, que permite resolver técnicamente algunos temas y facilitar que los puntajes sean comparables en el tiempo. Esa agenda está en curso. Era impracticable hacer todos los cambios en un año", agregó.

Para Bravo, en tanto, "la señal es que no da lo mismo ser un buen alumno, y eso está abriendo buenas oportunidades".

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