Rechazo a Dominga abre conflicto entre Medio Ambiente y Economía

En una tensa sesión, el Comité de Ministros -que integran los titulares de Medioambiente, Economía, Energía, Minería, Agricultura y Salud- rechazó con tres votos en contra, dos a favor y una abstención la reclamación presentada por la empresa Andes Iron, que buscaba revertir la negativa dada a nivel regional al permiso ambiental del proyecto minero Dominga.

Los seis ministros convocados comenzaron a llegar poco antes de las 7.30 de la mañana al edificio de la cartera que dirige Marcelo Mena, quien a su vez preside la instancia interministerial. De acuerdo con fuentes cercanas al proceso, a los asistentes les causó extrañeza la premura de la citación, enviada la tarde del viernes, y el escaso tiempo para evaluar. A eso se sumó que incluso la noche del domingo seguían recibiendo documentos relacionados con Dominga.

El diálogo entre los secretarios de Estado fue áspero, haciéndose patente el malestar de los titulares de Energía, Minería y Economía. Pero el momento más tenso se dio una vez iniciada la votación: el ministro de Economía, Luis Felipe Céspedes, cuestionó abiertamente la forma en que se citó al comité y el tardío envío de información, retirándose de la mesa en el momento de la votación.

"Me retiré antes que se procediera a la votación del proyecto, pues considerando la citación al comité del día viernes, y los plazos dados, en mi caso fue imposible realizar un análisis en profundidad de todos los antecedentes presentados. Considerando eso, yo decidí no participar", dijo Céspedes al ser consultado por su decisión. Mena, en tanto, le respondió que todos los documentos estaban disponibles (ver entrevista relacionada). Si Céspedes votaba a favor se habría generado un empate, obligando a decidir al presidente del comité, es decir, Mena. Pero en vez de eso, Céspedes, pidió aplazar la votación, lo que fue rechazado por el titular de Medio Ambiente.

También al interior de la instancia hubo sorpresa por el voto en contra del ministro de Agricultura, Carlos Furche, a quien se le atribuye una postura pro inversión. A la postre, su voto sería clave.

¿Por qué Medio Ambiente citó con sólo tres días de anticipación a una reunión de tal relevancia? Una de las razones que esgrimen cercanos a esa cartera fue que podían vencerse los plazos legales, pues una vez recibida la reclamación de la empresa -lo que ocurrió el 2 de mayo-. comenzó a correr un plazo de 60 días hábiles para que el comité se definiera.

Una vez finalizado ese período, Andes Iron podía invocar la figura de "silencio administrativo", que le permitía saltarse este paso e ir de manera directa a los Tribunales Ambientales. A pesar de que a la fecha ningún titular de proyecto ha solicitado esa figura, conocedores indican que Medio Ambiente se negó a correr ese riesgo y a asumir el costo político.

Fuentes cercanas a la instancia interministerial ven otro factor en la decisión de Mena: la próxima realización del Cuarto Seminario Internacional de Áreas Marinas Protegidas, justamente en la Región de Coquimbo entre el 4 y el 8 de septiembre, ocasión en la que el ministro Mena será el orador principal. A la cita esperaba llegar, de acuerdo con la versión de las mismas fuentes, con una resolución tomada sobre el futuro de Dominga.

La decisión del comité generó molestia entre los líderes empresariales. Según el presidente de la CPC, Alfredo Moreno, esto es una muestra de que el sistema "no funciona como corresponde". A su vez, el timonel del Consejo Minero, Joaquín Villarino, agregó que "para el país es una pésima noticia, porque si estamos preocupados por el crecimiento, nadie entiende que se rechace un proyecto que genera empleo, riqueza y bienestar a miles de chilenos".

El presidente ejecutivo de Andes Iron, Iván Garrido, en tanto, manifestó su "profunda decepción" con lo obrado por el Comité de Ministros, asegurando que "estamos profundamente dolidos. Nosotros confiábamos genuinamente en que esta administración atendiera los méritos del proceso de evaluación ambiental", señaló.

El ejecutivo agregó que esperaba que la instancia multisectorial revirtiera la decisión de la Comisión de Evaluación Ambiental de Coquimbo. "Lo que vemos es de una gravedad máxima, porque se profundiza la arbitrariedad. Que se llame a dirimir la reclamación que hicimos, un día viernes a última hora, sin tener todos los informes. Llama la atención que no se entreguen todos los informes y que se vote a las 7.30 de la mañana", dijo Garrido. De todas formas, la minera anunció que recurrirá a los Tribunales Ambientales para perseverar con la iniciativa.