El solitario cumpleaños de Carlos Marín en la cárcel
El ex presidente de la Bolsa de Valparaíso y dueño de la corredora de su mismo nombre está actualmente formalizado por apropiación indebida de cerca de $ 2.000 millones, pertenecientes a clientes de la corredora porteña.
Carlos Marín Orrego celebraba sus cumpleaños en alguna de sus propiedades en Valparaíso o Viña del Mar. Pero el último, el del 3 de marzo pasado, cuando sumaba 71 años a su vida, lo pasó solo, en una celda común de la Cárcel de Valparaíso y acompañado sólo por el paramédico de Gendarmería, que lo visita cuatro veces al día para darle los seis medicamentos que necesita por sus enfermedades cardíacas.
El ex presidente de la Bolsa de Valparaíso y dueño de la corredora de su mismo nombre, está actualmente formalizado por apropiación indebida de cerca de $ 2.000 millones, pertenecientes a clientes de la corredora porteña. Y desde el pasado 29 de diciembre, tras pasar más de un mes prófugo de la justicia, se encuentra con prisión preventiva en la Cárcel de Valparaíso.
Como su cumpleaños fue un día viernes, Marín Orrego no pudo estar con sus más cercanos. Sus días de visita son los lunes por la tarde y los sábados por la mañana, dos horas como máximo. Ni por cumplir 71 años, ni por ser una conocida figura del mercado porteño hubo una excepción ese viernes.
Al día siguiente, Marín Orrego habría recibido la visita de dos de sus cuatro hijos, además de algunos otros familiares y amigos. Ni Álvaro ni Rodrigo, sus otros dos hermanos, lo fueron a ver. Tampoco fue su ex esposa Caroline Roubik, de quien se separó durante este proceso judicial. Roubik, a quienes varios catalogan como la líder del esquema defraudatorio, también está formalizada y con arresto domiciliario. Ni aunque quisiera ir a ver a Marín Orrego hubiese podido.
La rutina del ex corredor de Bolsa es la típica de un interno en una cárcel, aunque casi no sale de su celda. Eso sí, recibe visitas médicas constantemente para tratar su delicado estado de salud. Su corazón funciona sólo al 23% de su capacidad y desde hace dos años tiene instalado un desfibrilador. Dos veces se ha desvanecido en la cárcel, requiriendo asistencia médica.
Mañana, en tanto, podría ser un día clave para Marín. A las 9.00 está fijada la audiencia de formalización en Santiago, por la Fiscalía Centro Norte, por infracciones a la Ley de Mercado de Valores. La gran duda es si podrá viajar para enfrentar la justicia. El tribunal santiaguino pidió a su par de Viña del Mar que se le traslade en una ambulancia, con un paramédico e implementos de emergencia cardíaca, petición que aún no es respondida.
Su defensa pidió que se le formalice por videoconferencia, para evitar el riesgo de algún problema en el trayecto. Aún está en veremos cuál es la alternativa que tomará el tribunal.
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