Top model alemana Claudia Schiffer quiere tener su propia firma
La modelo se confesó hoy en Berlín con la temida crítica de modas Suzy Menkes, organizadora de la conferencia Techno Luxury.
La alemana Claudia Schiffer, una de las top models más emblemáticas de la década de los 90, confesó hoy que le encantaría tener su propia marca de moda, según dijo en un foro de debate en Berlín que se enmarca en la conferencia Techno Luxury.
La anfitriona de este encuentro, que continuará este miércoles es la famosa y temida crítica de modas británica Suzy Menkes, de 65 años, que en la conversación con la top model alemana fue encantadora.
"Me gustaría hacer algo con cachemira", dijo Schiffer en referencia al tejido de pelo de cabra que en el mundo de la moda es altamente cotizado, al punto que es considerado un material de lujo.
La rubia y sexy modelo que ha protagonizado importantes campañas de moda para firmas como Guess y Chanel también imagina posible tener una marca de bolsos, al tiempo que aclaró que aún no tiene planes concretos. Destacó que le importa la credibilidad ya que "el cliente no es tonto".
Schiffer, de 39 años, vive hace nueve años en Inglaterra, está casada con el cineasta Matthew Vaughn y es madre de un niño y una niña. Y aunque ya se retiró de las pasarelas este año, continúa su carrera de modelo en campañas de moda, aunque no con la intensidad que le dedicó en los años 90. "Me gustaría seguir con esto el mayor tiempo posible".
En el inicio de la conferencia, Menkes manifestó que le gustan las nuevas tecnologías e internet. "No me siento para nada amenazada por bloggers".
SUZY MENKES
La periodista del diario International Herald Tribune agregó que algunas columnas de moda en la web le parecen "muy interesantes". Y apuntó: "Sí, peleamos por el futuro del periódico, pero miren qué bueno es para los árboles".
Junto a Anna Wintour, editora de revista Vogue USA, Menkes es considerada una de las observadoras más importante del mundo de la moda.
La analista del diseño de indumentaria señaló que en un desfile en Tokio le llamó la atención cuán fascinante puede ser el teléfono móvil como instrumento en la moda.
Cuando vio cómo algunas mujeres del público levantaban sus brazos con sus teléfonos, pensó que querrían fotografiar las prendas del desfile. Pero no: las japonesas usaban sus celulares para captar un código electrónico de las prendas, y así poder comprarlas luego.
En la conferencia de dos días los temas centrales son el lujo y las tecnologías. Entre otras cosas, se presentó un ordenador portátil que tiene el aspecto de un bolso.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.