UDI y RN arremeten contra rol de Arenas en Consejo de Asignaciones

Un reclamo formal para poner término a la participación del jefe programático de Michelle Bachelet, Alberto Arenas (PS), en el Consejo de Asignaciones Parlamentarias presentarán en la Cámara las bancadas de la UDI y RN.

En su calidad de ex director de Presupuestos, desde 2010 Arenas ha sido consejero de ese organismo del Congreso, que regula los fondos para labores de diputados y senadores. Y en marzo comenzó a compartir ese rol con funciones dentro del comando opositor. De hecho, ayer Arenas asistió a una nueva reunión del consejo en el ex Congreso.

Pero en el oficialismo molestó que el economista se sumara, además, a instancias de coordinación legislativa, desde donde han surgido pautas a parlamentarios opositores para rechazar y demorar ciertos proyectos de ley del Ejecutivo. El hecho quedó expuesto en una minuta, cuya autoría es negada por el comando de Bachelet, en la que se pedía "dilatar" la tramitación del ministerio del deporte.

Pese a que el equipo de la candidata ha tomado distancia del texto, en el oficialismo creen que Arenas, al menos, ha sido partícipe de reuniones en las que se han acordado estrategias de "torpedeo" legislativo.

La bancada UDI, incluso, está preparando un escrito, con el patrocinio de 10 diputados, para ser presentado en la sala y pedir la destitución de Arenas como miembro del Consejo de Asignaciones, si es necesario.

Ese camino no es fácil. Según la Ley Orgánica del Congreso, los consejeros pueden renunciar, pero son "inamovibles", salvo que incurran en "incapacidad, incompatibilidad o negligencia manifiesta en el ejercicio de sus funciones", así calificada por tres quintos de los senadores (23 votos) y los diputados (72 votos). Esto fija un alto quórum y hoy el oficialismo no tiene esa cantidad de votos. Además, algunos creen que Arenas tampoco tendría "incompatibilidad", porque no ejerce otro cargo público.

Este tema ya había sido analizado semanas atrás por la UDI. Entonces, se desestimó pedir su salida, porque se consideró que era legítimo tener postura política.

Pero el debate por la minuta abrió un nuevo escenario. En el oficialismo creen que existe un "conflicto de interés" entre quien dispone dineros a los parlamentarios y quien participa en reuniones para fijar pautas de cómo deben votar los legisladores. A juicio del oficialismo, se podría esgrimir la causal de "negligencia manifiesta".

El jefe de bancada UDI, Gustavo Hasbún, dijo que "el señor Arenas tiene derecho a tener posición política, pero no puede trabar la agenda legislativa. Hay una contradicción gravísima".

"El señor Arenas estaría aparentemente detrás de este documento para entorpecer la labor legislativa, y mientras exista la sospecha existe un conflicto de interés", dijo el jefe de diputado de RN, Leopoldo Pérez.

Hasta el cierre de esta edición no había sido posible tener una versión de Alberto Arenas.