Columna de Matías Concha: El rol de la Macrozona Sur en la era de la descarbonización
"Si la dinámica de violencia alimentado por profundizar diferencias continúa, toda la contribución verde, sostenible o que permita balancear un equilibrio con la naturaleza va a ser inútil. En pocas palabras, para lograr el equilibrio con la naturaleza hay dos caminos posibles: o se destruye toda iniciativa de emprendimiento o mediante la inversión verde se convierte a la Macrozona sur en el verdadero protagonista de la transición energética. "
Cuando el soldado y poeta Alonso de Ercilla escribió la Araucana, resaltó mediante una magistral obra literaria la valentía, coraje y resistencia mapuche dentro del proceso de conquista. Su aporte fue mucho más allá de cumplir el objetivo de ensalzar la conquista española, ya que logró profundizar una legítima y auténtica pieza que tuvo la particularidad de entrelazar y dar forma a la configuración del alma de Chile. La sorpresa del contenido de este poema fue tal, que García Hurtado de Mendoza encomendó a don Pedro de Oña a escribir un nuevo poema que explícitamente ensalzara la victoria española, el cual fue llamado “Arauco Domado”. Si bien el contenido de esta última obra fue promovido fuertemente por la corona, ante la historia quedó en el olvido por precisamente carecer de la realidad, legitimidad y empatía de La Araucana.
A lo largo de la historia de Chile, el conflicto mapuche no ha estado ajeno a diferencias y manifiesta un problema de fondo que radica que, según la cosmovisión mapuche, el hombre es parte de un todo con la naturaleza versus la visión cristiana occidental en la cual el hombre domina a la naturaleza. Así como dentro de un ambiente de conflicto La Araucana dotó de elementos diferenciadores a Chile del resto de Latinoamérica, en la cosmovisión existe un elemento que en la era de la descarbonización, puede ser la llave para abrir un nuevo camino de esperanza.
En la economía fósil de los últimos 100 años, Chile era irrelevante en la generación de hidrocarburos y dado su pequeño tamaño relativo, también quedó en la irrelevancia de las emisiones globales. Ahora bien, mirando hacia futuro desde la Macrozona Sur, la situación cambia por tres razones de que están intrínsecamente arraigadas en la transición energética verde: (i) Los bosques renovables de la Macrozona actúan como verdaderas aspiradoras naturales para capturar gran parte de las 50 [MMTonCO2] del total de las 105 [MMTonCO2] de emisiones que emite Chile (ii) El potencial eólico de la Macrozona puede fácilmente permitir que en los lugares de bosques renovables ya explotados se logre una generación renovable contracíclica a la generación solar que permita generar cuando las centrales fotovoltaicas no logran generar, logrando así un impulso a una generación renovable y de bajo costo; (iii) La generación de hidrógeno verde a partir de generación eólica aporta la generación de un combustible que puede ser fundamental para hacer esta transición posible.
Si la dinámica de violencia alimentado por profundizar diferencias continúa, toda la contribución verde, sostenible o que permita balancear un equilibrio con la naturaleza va a ser inútil. En pocas palabras, para lograr el equilibrio con la naturaleza hay dos caminos posibles: o se destruye toda iniciativa de emprendimiento o mediante la inversión verde se convierte a la Macrozona sur en el verdadero protagonista de la transición energética. Si adicionalmente se escucha al voto de la gran mayoría de chilenos que habita en esta zona que quiere vivir bien sin violencia, la descarbonización le da el sustento para creer en un legítimo y auténtico camino para salir adelante. Precisamente por medio de inversión verde se nos vuelva a colocar en la esfera de un equilibrio con la naturaleza, pero a diferencia de un decrecionismo, valida un camino mejorando importantemente la calidad de vida de la gran mayoría de las personas.
Si bien las narrativas de Cervantes y de Oña hablan del mismo conflicto, sólo una pasó a la historia y se entrelazó con el devenir de su historia. De la misma forma, si bien hubo intentos de refundar a Chile en un intento de constitución que buscaba dividirnos argumentando las diferencias entre etnias y costumbres, la capacidad de poder rescatar el verdadero valor de convergencia y sentido de futuro en aras de una propuesta sostenible va a ser el gran protagonista para unirnos bajo un objetivo común. En vez de dividirnos, la clave está en cómo entender que la Macrozona sur y equilibrio con la naturaleza se vuelven incidentes y se convierten en los verdaderos protagonistas en la solución del mayor problema que enfrentamos como humanidad, vale decir, armonizar la relación sostenible con la naturaleza mejorando la calidad de vida de las personas.
* El autor es consejero Sofofa.