Escasos resultados de plan Calles sin Violencia

Un informe del Instituto Libertad -que fue recogido por este medio- entregó reveladoras conclusiones en lo que concierne al combate contra el delito. Al analizar las 76 comunas donde se ha aplicado el plan gubernamental Calles sin Violencia, se observa que en el período enero-octubre los homicidios han presentado un incremento de 7,6% respecto de igual período del año anterior, siguiendo la tendencia que se estaría observando en el resto del país, donde los homicidios habrían registrado un incremento superior al 9%. El estudio se basa en las cifras recogidas a partir del Sistema Táctico de Operaciones Policiales de Carabineros (STOP), y según se desprende de ellas el plan implementado por el gobierno muestra un bajo rendimiento, sobre todo en la zona centro, que incluye Valparaíso y Viña del Mar, como también en la Región Metropolitana. En esta última ya no existen comunas priorizadas, sino que el plan abarca a la región como un todo, consignándose un aumento de los homicidios superior al 4%.

El gobierno ha buscado desestimar las conclusiones del estudio, sobre la base de que el STOP considera información incompleta, y que contradice el Informe Nacional de Víctimas de Homicidios Consumados en Chile, el cual contiene las únicas cifras validadas en conjunto por todas las instituciones del Estado vinculadas al trabajo en seguridad. Según dicho reporte, en el primer semestre de 2024 se registró una baja de 9,4% en la tasa de víctimas de homicidios consumados por cada 100 mil habitantes, comparado con el mismo período del año anterior.

Pese a este desmentido oficial, el Ministerio Público acaba de entregar su informe estadístico -correspondiente al tercer trimestre- sobre crímenes consumados y frustrados, según el cual se registró un alza de 10,54% respecto a igual periodo del año anterior, donde la Región Metropolitana es la que presenta el mayor número de asesinatos. El reporte de la Fiscalía muestra también el aumento que han registrado los asesinatos sin imputado conocido, ratificando una preocupante tendencia que viene registrándose desde hace tiempo, lo cual naturalmente dificulta la persecución penal para dar con los culpables.

A pesar de los intentos del gobierno por procurar bajarle el perfil a estas estadísticas, los antecedentes preliminares están sugiriendo que los homicidios en el país están lejos de presentar una contención significativa y, más que apostar por los desmentidos, la autoridad debería hacerse cargo de esta realidad, lo que exige una exhaustiva revisión de los planes y estrategias que ha implementado. Es un hecho que la ciudadanía sigue siendo sacudida por escabrosos asesinatos que se cometen a diario, con patrones bien definidos: la mayoría de los crímenes son ejecutados con armas de fuego, suele no haber imputado conocido y los homicidios tienden a concentrarse en determinadas zonas geográficas. Esto claramente sugiere que el mayor incremento previsiblemente está asociado a la expansión del crimen organizado, a todo lo cual se suma la ola de delincuencia habitual que sigue golpeando a los ciudadanos comunes.

El plan Calles sin Violencia fue anunciado por el gobierno en abril de 2023, abarcando inicialmente 46 comunas, que concentraban el 55% de los homicidios en el país. Pese a que en junio de este año se anunció una segunda fase, que entre otros aspectos contemplaba el despliegue de mayor personal policial y reforzamiento de la vigilancia en puntos específicos, todo apunta a que los resultados distan de ser satisfactorios, por lo que se hace indispensable conocer qué medidas pretende adoptar la autoridad.