Participación ciudadana en la generación de una política de género en ciencias

Este año sin lugar a dudas, las ciencias se han tomado la tribuna durante la pandemia. Muchas palabras que solemos usar quienes nos dedicamos a la biología molecular como PCR, y RNA, pasaron a formar parte de un vocabulario que ahora podemos escuchar en medios de comunicación y conversaciones con amistades y/o colegas de trabajo ajenos al área.

La generación de investigación ha permitido que día a día veamos como la evidencia científica ha permitido descartar o aceptar maneras de cómo enfrentar la pandemia. Por primera vez en la historia tenemos diferentes vacunas, que se han generado en tiempo récord gracias a la investigación científica. Vacunas que en Chile se produjeron desde fines del siglo XIX hasta principios del siglo XXI y que en la actualidad sólo se producen de uso animal en el área privada y para uso de personas a nivel universitario y un grupo en el Instituto de Salud Pública (ISP).

También han sido meses en que se ha evidenciado cómo los estereotipos de género y la discriminación en torno al género afectan las oportunidades de las personas, no sólo a nivel profesional, sino perpetuando las brechas entre hombres y mujeres en nuestra sociedad. Esto afecta la ciencia y la investigación que se genera porque se replican esas brechas.

En enero del año 2020, el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación estableció una Hoja de Ruta para la construcción de una Política de Igualdad de Género en CTCI, como un hito comunicacional, pero sin la debida participación previa de organizaciones de la sociedad civil.

Sabemos que, con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Comunidad Mujer, se han presentado indicadores de género para las universidades, y que se han discutido. También se lanzó una consulta pública con los ejes de una política de género ya establecidos, que nuevamente no contaron en su génesis con la participación de las organizaciones de la sociedad civil, más allá del lanzamiento al cual fueron convocadas algunas asociaciones.

Existen varias miradas sobre la participación ciudadana, particularmente entre quienes defienden la democracia representativa versus la democracia participativa. El tema de la participación ciudadana no es nuevo, ha estado hace varios años en la discusión de las ciencias políticas y casi desde sus orígenes en las políticas públicas. Existen diversas definiciones, miradas y resistencias en torno a la participación ciudadana.

En Chile, en general, el proceso de participación ciudadana tiene un espacio institucional reducido y con baja articulación al ciclo de las políticas públicas. Los asuntos públicos históricamente, han sido protagonizados principalmente por actores estatales y partidos políticos (representados mayoritariamente por hombres) excluyendo a la sociedad civil (y por cierto a las mujeres). Sin embargo, un discurso pro-participación de diferentes actores políticos ha emergido y se ha manifestado, pero esto hasta ahora no se ha correlacionado con prácticas que permitan la incorporación efectiva de la ciudadanía en el proceso de toma de decisiones. La generación de la primera política de género en el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, lamentablemente, es un ejemplo de esto.

*Dra. en Ciencias