Algunos aseguran que un rico Bloody Mary es lo mejor para una mañana de resaca, un punto que trataremos con mayor precisión al final de esta nota. Otros, simplemente quieren acompañar su brunch con este tradicional cóctel, quizás para darle una pequeña tregua a la mimosa o un bellini. Lo cierto es que lleva más de un siglo acompañando los aperitivos desde el día que se creó, y lo más impresionante, es que sus variaciones han sido las mínimas.

Componentes clave de un Bloody Mary

Empecemos por definir esta bebida.

Licor de base: Vodka. El clásico no se anda con chicas, directo a un trago fuerte.

Jugo de tomate. Esto tampoco es negociable. Los tomates proporcionan una base sabrosa, dulce y ligeramente ácida sobre la que se construye el resto de las bebidas.

Aditivos salados: Aquí es donde puedes empezar a ser creativo. Lo más clásico, una salsa Worcestershire, pero hay quienes le dan su toque con un caldo Maggi o incluso con un caldo de ternera. En realidad, la elección depende de ti; sólo asegúrate de que lo que utilices contenga sal y sabores salados.

Especias: La mayoría de las recetas requieren un toque de pimienta, así como especias y hierbas aromáticas, como el orégano o la albahaca.

Picante: Aunque puedes sustituirlo por una salsa picante como tabasco o incluso aceite de ají, no hay nada como el rábano picante o la salsa de horseradish para conseguir ese característico ardor que despeja hasta las narices. Esto se debe a que, mientras que todos los ajíes contienen capsaicina, el ardor de esta salsa viene del aceite de mostaza.

Acidez: La mayoría de las recetas llevan jugo de limón, aunque la cantidad depende del jugo de tomate utilizado como base y de si se utiliza una salsa picante ácida (como el Tabasco).

Aroma: Las matas de apio son un buen acompañamiento aromático para un Bloody Mary y, en lo que respecta al equilibrio, son tan importantes como la hierbabuena en un mojito. Pero el apio no se convirtió en su acompañamiento clásico de inmediato, así que no dudes en probar otras opciones si no tienes apio.

Historia del Bloody Mary:

Un muy premiado barman y propietario de un bar en Nueva York, Jack McGarry, hizo un estudio en cuatro partes sobre la historia del Bloody Mary para Difford’s Guide en 2012, una guía para amantes de los licores, tragos y cócteles.

Estos son los aspectos más destacados del informe de McGarry:

1892: El Bloody Mary nace como el Oyster Cocktail, una receta para una bebida caliente sin alcohol que contiene jugo de tomate, Tabasco, jugo de limón y ostras.

1920: El cóctel de jugo de tomate gana popularidad en Estados Unidos. Sigue sin contener alcohol, pero a veces se condimenta con tabasco, limón o Worcestershire.

1927: El actor y cómico George Jessel encarga el primer Bloody Mary como lo conocemos hoy, una receta mitad vodka y mitad jugo de tomate supuestamente creada para aliviar la resaca de la noche anterior.

Años 50 y 60: En esta época, el Bloody Mary es un fenómeno mundial y una bebida bien aceptada para el brunch y la resaca. Fue también en esta época cuando un cliente desconocido pidió una rama de apio para remover la bebida, y así el acompañamiento con rama de apio se hizo popular.

¿Es el vodka más económico el mejor para preparar un Bloody Mary?

Los expertos en mixología aseguran que no es necesario utilizar un vodka de excelente calidad para este trago, suponiendo que los demás ingredientes ahogarán los matices de los mejores licores.

Vamos a la ciencia detrás de esta teoría sobre el vodka del Bloody Mary: la capsaicina –la sustancia que se encuentra en los ajíes– activa el receptor TRPV1 en los humanos, la vía diseñada específicamente para permitirnos detectar sensaciones de ardor y picor. Resulta que el alcohol activa exactamente el mismo canal, lo que ayuda a explicar por qué el alcohol de alta graduación deja una sensación de ardor y hormigueo en la lengua. ¿Y qué pasa con la salsa de rábano picante? La mostaza picante del rábano activa otro receptor conocido como TRPA1, que a su vez es responsable de detectar sensaciones “irritantes” y de dolor.

Por lo tanto, como los Bloody Mary provocan estas sensaciones de todos modos, no notaremos el ardor característico de cualquier vodka barato, ya que sólo asociaremos las sensaciones desagradables con el picante de los ajíes o el lagrimeo del rábano picante.

Y no hay que olvidar que la sal es el supresor más potente de otros sabores y los Bloody Marys están cargados de sal.

Ahora, ¿Puede un Bloody Mary curarnos de una mala resaca?

Dejemos una cosa clara: la comunidad médica aún no se ha puesto de acuerdo sobre las causas reales de la resaca. Las últimas investigaciones que se han realizado sugieren que, aunque la deshidratación nos hace sentir peor después de una noche de consumo excesivo de alcohol, las resacas están causadas por algo más que la deshidratación. Más bien parece que el consumo excesivo de alcohol afecta a la forma en que nuestro cuerpo metaboliza y utiliza los nutrientes.

Pero, independientemente de las causas de la resaca, el Bloody Mary contiene muchos ingredientes que pueden hacer que te sientas mejor:

- Los tomates contienen los electrolitos sodio y potasio, el antioxidante vitamina C y toda una serie de vitaminas, como el licopeno y la vitamina B6. La vitamina B6, en concreto, es uno de los pocos remedios que han demostrado reducir los efectos de la resaca.

- En cuanto a los demás ingredientes de un Bloody Mary, todos los complementos salados tienen un alto contenido en glutamatos (o glutamato monosódico o “umami”, como se le conoce). Y hay algunos estudios que afirman que los suplementos de glutamina podrían ayudar con las resacas, pero esto son más bien teorías sin tanta prueba científica aún.

- En todo caso, no nos leamos la suerte entre gitanos, porque solo hay una cosa cierta: el vodka del Bloody Mary es alcohol finalmente y no nos hace nada de bien. Si realmente quieres sentirte mejor después de una larga noche de fiesta y piscola, mejor prueba con un Virgin Mary a la hora del brunch.

En resumen: A pesar de la tradición, muchas investigaciones oficiales y no científicas finalmente desacreditan al Bloody Mary como una cura para la resaca, según el blog de ciencia alimentaria Serious Eats. Eso sí, los ingredientes no alcohólicos de un Bloody Mary aportan electrolitos, agua, vitamina C y vitamina B6, todo lo cual puede ayudar con la poco atractiva caña. El vodka, no tanto.

Receta Bloody Mary

Ingredientes:

  • Vodka (no tan caro, no es necesario, como ya vimos)
  • Jugo de tomate
  • 1 cucharada de jugo de limón
  • Un chorrillo de salsa Worcestershire
  • Unas gotas de Tabasco
  • Sal y pimienta
  • Tallo de apio y rodaja de lima para decorar (opcional)