Los huevos son una fuente de proteína de alta calidad, porque contienen todos los aminoácidos necesarios para su síntesis en el cuerpo humano. También son ricos en otros nutrientes importantes, como las vitaminas B12, D, A y E, además de minerales como el hierro, el zinc y el selenio.

Lo mejor de todo es que no se necesitan muchos, apenas un par al día, para cubrir las necesidades proteicas diarias, y que en la cocina son económicos y versátiles. Se los puede agregar a una infinidad de preparaciones, tanto dulces como saladas, que son parte de los recetarios tradicionales de casi todo el mundo.

Considerando todos estos atributos, pero en especial su delicioso sabor, la cocinera y administradora de empresas Betania Álvarez decidió crear Eggy, una cafetería que basa todo su menú en preparaciones con huevo.

Nos compartió los platos estrella de su carta en el recetario de marzo, donde también figura la receta que nos enseñará a hacer este viernes. Se llama shakshuka, un plato especiado de Medio Oriente, que lleva salsa de tomates, paltas, queso y, por supuesto, huevo, entre otros ingredientes. A través de su elaboración dominaremos el difícil arte de crear un par de huevos pochados perfectos.

• 5 tomates maduros
• ¼ de pimentón rojo
• ¼ de pimentón verde
• ¼ de pimentón amarillo
• ½ de cebolla en cubitos
• Aceite de oliva
• 1 cucharadita de garam masala
• 1 cucharadita de curry
• Queso feta
• ½ palta laminada
• 2 huevos
• Vinagre blanco
• Ciboulette.

1. Picar los tomates en trozos y triturarlos en una juguera o procesadora hasta que queden semi molidos, pero no completamente.
2. En una olla, con un chorrito de aceite de oliva y a fuego muy bajo, poner los tomates y comenzar a cocinar la salsa. Agregar una cucharadita de azúcar y tapar.
3. En un sartén aparte, y con otro chorrito de aceite de oliva, saltear la cebolla en cubitos y los pimentones cortados en tiras (juliana) a fuego bajo.
4. Tras 20 minutos, o cuando la salsa ya esté bien cocinada, incorporar el sofrito de pimentones y cebolla a la olla, junto a una cucharadita de garam masala, otra de curry, sal y pimienta a gusto. Seguir cocinando por cinco minutos más. Dejar laminada media palta.
5. Para preparar los huevos pochados, poner a hervir tres partes de agua junto con una parte de vinagre blanco en una olla baja. Cuando comience la ebullición, bajar el fuego al mínimo.
6. Romper un huevo sobre un bol o pocillo pequeño. Depositarlo con cuidado en la olla con agua y vinagre y esperar a que comience a flotar. Si el huevo se queda pegado en el fondo de la olla, con una cuchara grande puedes comenzar a soltarlo hasta que flote.
7. Hacer lo mismo con el otro huevo. Estarán listos cuando la clara esté cocida —blanca, no transparente— y la yema esté cremosa, a punto.
8. Sacarlos con una espumadera, con mucho cuidado para no reventarlos, y pasarlos a una fuente con agua helada para eliminar el vinagre y detener la cocción.
9. Para finalizar, montar en una paila o sartén la salsa de tomates, los dos huevos pochados, esparcir queso feta desgranado y palta laminada. Sobre los huevos agrega ciboulette picado, pimienta y un chorrito de aceite de oliva. Acompañar con tostadas del pan que más te guste.