Paula 1120. Sábado 27 de abril 2013.

Hace un año, más de la mitad de los habitantes de Socoroma –a 125 kilómetros de Arica– se dedicaba a la agricultura en las afueras de este pequeño poblado andino. Hoy, muchos de ellos han vuelto para restaurar su valiosa iglesia y conservar su patrimonio.

Socoroma y su iglesia San Francisco de Asís, construida a comienzos del siglo XVII en el estilo barroco andino, tuvieron un pasado de ajetreada actividad cultural cuando el pueblo formaba parte de la llamada Ruta de la Plata, por donde pasaba el mineral que se extraía en Potosí, Bolivia, en su camino al puerto de Arica. Ahora, la Fundación Altiplano, bajo su Plan de Restauración de Iglesias Andinas en la Región de Arica y Parinacota –que contempla 31 de las 80 iglesias que hay en la región– busca devolverle parte de su glorioso pasado. Para eso pusieron a trabajar a los mismos lugareños, quienes, supervisados por el arquitecto peruano Ángel Guillén, han aprendido oficios tradicionales como cantería, carpintería y construcción en adobe para llevar a cabo la restauración que planean terminar a mediados de mayo de este año.

Mujeres a la obra

De las siete iglesias que han sido restauradas hasta el momento por el Plan de Restauración de Iglesias Andinas en la Región de Arica y Parinacota, esta es la primera vez que las mujeres participan en el proceso a través de la Escuela de Restauración de Bienes Culturales Muebles de Socoroma. Ahí, aprenden a restaurar cuadros, frescos y figuras religiosas como vírgenes y crucifijos. Guiadas por el restaurador boliviano Víctor Ulloa, a cargo del taller, han aprendido a realizar minuciosas limpiezas con bisturí o solventes, a aplicar yeso o adobe y a utilizar tarugos para ensamblar piezas.

Ruta de las Misiones

Paralelo a su programa de restauración de las iglesias andinas, la Fundación Altiplano diseñó la Ruta de las Misiones, un proyecto de turismo patrimonial que busca convertir a los pueblos donde se ubican las iglesias restauradas en un destino atractivo y que ofrezca nuevas oportunidades a las comunidades locales. Ya funcionan algunos tramos, como los de Belén, Chitita y Esquiña. Se espera que en 10 años las 31 iglesias estén restauradas. Para coordinar visitas hay que hacerlo con 15 días de anticipación al correo contacto@fundacionaltiplano.cl

Como la de Socoroma, todas las iglesias contempladas en el Plan de Restauración de la Fundación Altiplano fueron construidas entre los siglos XVI y XVII en el estilo barroco andino: el campanario suele estar separado de la estructura principal y el arco de piedra que bordea la puerta de entrada siempre tiene detalles tallados, como figuras de animales o de la naturaleza.

Sobre este burro de madera y yeso del siglo XIX viaja la figura de Cristo en la peregrinación del Domingo de Ramos en Socoroma. Su restauración les tomó dos meses a las mujeres que trabajan en la escuela de restauración que montó la Fundación Altiplano en el pueblo.