"Papá, necesito saber dónde está mi mamá". Este pedido, de acuerdo a Luis Miguel, la serie -producida y transmitida por Netflix-, es el último que el Sol de México hace a su padre, Luisito Rey, antes de su muerte, en 1992. Fiel a la realidad o no, lo cierto es que el paradero de Marcela Basteri (quien hoy tendría 72 años) es un completo misterio.

La madre del cantante desapareció en 1986 y se dice que la última persona que la habría visto fue Luis Rey. Que estaría internada en un psiquiátrico en Italia, en un convento, que se marchó por voluntad propia con un siciliano llamado Antonio, que murió en un tiroteo en una fiesta en México o que el mismísimo Luisito Rey la habría asesinado son algunas de las teorías que han circulado durante años respecto a su enigmático destino.

Son más de tres décadas de una interrogante que se transformó en una especie de leyenda urbana de la cultura pop latinoamericana, por lo que el año pasado, cuando Netflix anunció la serie autorizada por el mismísimo ídolo mexicano, las alertas se encendieron. ¿Quién encarnaría a Marcela? ¿Sabríamos, de una vez por todas, qué pasó con la madre de Micky? La responsabilidad recayó en los hombros de la actriz italiana Anna Favella (34), quien coincidentemente comparte la misma nacionalidad de Marcela y también el hecho de haber vivido en Argentina.

¿Conocías a Luis Miguel antes de participar en la serie?

Sí, lo conocía como cantante, obviamente. Él participó en el Festival de San Remo de 1985, el más importante de la televisión italiana. Yo tenía solamente dos años (ríe); él ganó el segundo lugar en el festival y su canción tuvo mucho éxito. En los años siguientes la gente la seguía cantando y me acuerdo que mis primas y mis amigas estaban todas enamoradas de él. Pero no sabía nada de su vida privada.

Considerando todo el misterio que existe en torno a su figura, ¿cómo construiste el personaje de Marcela?

Leí muchísimas cosas de Marcela, además el director y la productora me hablaron de ella y de esta historia que íbamos a contar. Pero mi suerte fue que existen varios videos de Luis Miguel de niño, a veces con Marcela y Luis Rey. Entonces, con todo ese material intenté crear una mujer, más bien una mamá, que parecía tener una relación muy especial con sus niños. La única manera de armar este personaje era darle un alma como ser humano, y busqué el alma de Marcela en los ojos de niño de Luis Miguel. Imaginé a Marcela como esa mujer que miraba a su hijo y veía realmente un sol; quise darle esa alma de luz y luminosidad que tenían ella y Luis Miguel.

YO SÉ QUE VOLVERÁS...

"Muy vigilante. Aquí te esperaré, lo he prometido. La espera sería inútil y asfixiante si no supiera cuánto me has querido". Corría 1994 y Luis Miguel lanzaba su décimo álbum de estudio, Segundo romance. El disco, compuesto por once boleros clásicos (al igual que Romance, publicado tres años antes y que marcó una exitosa alianza con el compositor Armando Manzanero), posee un detalle muy especial. El track número 10, Yo sé que volverás, es el único que Luis Miguel dedicó a su madre públicamente. Lo hizo en una entrevista para un medio mexicano de la época, admitiendo además que le costaba mucho cantarla en vivo.

Pero estas letras no son las únicas que el Sol ha cantado para ella. De acuerdo con la serie de Netflix, específicamente en el capítulo 11, uno de los últimos encuentros que Luis Miguel tendría con Marcela habría sido en marzo de 1985, meses antes de su desaparición. El cantante se encontraba en Buenos Aires para una presentación en el Luna Park y llevaba tres meses sin verla. Ella decidió sorprenderlo en su camerino y luego 'Micky' la invitó al escenario para dedicarle una canción muy conocida por ellos y su entorno familiar.

Leí en una entrevista que la escena que más te había conmovido filmar es justamente cuando Luis Miguel le canta a su mamá. ¿Qué significó para ti y cómo la afrontaste?

Sí, es la escena que más me emocionó porque era el momento en que él le canta a su mamá mirándola a los ojos. Es algo que pasó de verdad y que todos nosotros antes de filmar vimos. Me emocioné verdaderamente, como actriz y como persona. Me imaginé a esta mujer sufriente, que estaba en una posición muy particular, porque no es normal que una madre esté arriba de un escenario con su hijo artista cantándole. Y esta canción (titulada Marcela) era muy significativa porque la escribió Rey a su mujer, pero ahora era el tema de amor que Luis Miguel le estaba dedicando a ella en un instante muy trágico de la historia. Como diciéndole: "Mamá, yo te quiero. Lo hago verdaderamente y quiero que tú estés aquí a mi lado en el escenario que ahora es mi vida"; porque él en ese momento estaba en el pleno de su carrera.

COLLEZIONE PRIVATA 

Cuando Anna Favella nació, en el año 1984, Luis Miguel tenía 13 años y ya cargaba con tres exitosos álbumes a su espalda. Oriunda de Roma, estudió filosofía, fue niñera, camarera y vendedora en boleterías teatrales hasta que finalmente decantó por la actuación. Su papel como Marcela posee una característica particular: su acento. Ella no habla un español neutro. En 2010 Anna formó parte del reparto de la telenovela Terra ribelle, producción italiana pero filmada en Argentina, donde además de aprender a tomar mate se impregnó del tono argentino.

La madre del cantante también es italiana de nacimiento y coincidentemente vivió un tiempo en Buenos Aires, donde conoció a su esposo, Luisito Rey, una relación que posteriormente -de acuerdo con varias fuentes- estaría marcada por el machismo y la violencia psicológica. "Él era un hombre con un machismo muy marcado, Marcela no podía hablar ni dialogar", cuenta Anna. "Fue muy fuerte desarrollarla porque lamentablemente esas cosas pueden pasar en cualquier familia, y pensar que estábamos contando una historia verdadera era muy difícil. Entonces comencé a explorar a una madre que intenta proteger a sus hijos, porque no podía hablar con su marido. La única manera de decir lo que sentía era cuidando a su niño, permitirle vivir como un chico normal".

En México hoy en día las piñatas que más se venden (para ser golpeadas en fiestas y cumpleaños) son las de Luisito Rey, ¿qué opinas de ese odio que su figura ha provocado?

Ay, ¡pobre Óscar Jaenada! (ríe haciendo referencia al actor catalán que interpreta a Luisito Rey). Pero hablando en serio, me imagino que para la gente, los fanáticos que odian así al papá de su artista preferido, es como su forma de protegerlo de una manera inimaginable. Para mí ese odio es querer más a Luis Miguel.

¿Te esperabas este remezón de la cultura pop a raíz de la serie?

Me lo imaginaba un poco, porque la gente en Latinoamérica quiere mucho a Luis Miguel. Todos estaban esperando saber lo que le pasó en su vida privada y cómo vivió varias épocas que las personas aún recuerdan: cuando desapareció su mamá, de niño cantando en la televisión, de cuando era adolescente, de sus novias (...) Y creo que sí, creo que la gente estaba esperando la verdad finalmente. Pero además una persona que no es muy fan de Luis Miguel tiene la posibilidad de ver una serie que te engancha mucho, que está muy bien hecha.

NO ME PUEDES DEJAR ASÍ 

La confirmación de una segunda temporada por parte de la producción, hasta el momento del cierre de esta edición, no es segura. Aunque los fanáticos han elaborado teorías a partir de las publicaciones que los mismos actores han hecho tras la emisión del último capítulo. Diego Boneta (el actor que da vida a Luis Miguel adulto en la plataforma) subió una imagen acompañado del cantante donde se puede leer un críptico: "Emocionado por lo que se viene…". Anna tampoco confirma ni asegura nada. "Ay, es que no sé. La verdad es que no sé (ríe), crucemos los dedos", dice.

Tras tu paso por la serie, ¿cuál es la opinión que tienes ahora de Luis Miguel?

Yo lo ubicaba como cantante en la época de los años 80, y ahora que lo conozco más soy casi una fan. Sobre todo de su época de niño, porque he visto tantas veces sus videos y escuchado sus canciones que, durante las grabaciones de los conciertos, yo me sentía como una verdadera fan, con todo el mundo cantando. Me di cuenta de que él es una persona que tiene una energía y un alma muy fuertes, y ahora entiendo por qué la gente siempre lo ha querido mucho.