Arturo Puig
Indiscutible galán televisivo y recordado por la serie noventera Grande, pa!, el argentino Arturo Puig (71) hoy brilla en el teatro como actor y director. A fin de año se presentará en Santiago con Nuestras mujeres, obra que protagoniza y es furor en Buenos Aires.
Paula 1212. Sábado 05 de noviembre de 2016.
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En la obra, Puig comparte escenario con otros dos gigantes del teatro argentino: Guillermo Francella y Jorge Marrale.
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25 años después del hit televisivo, a Arturo Puig todavía le gritan por la calle "¡Grande, pa!", pero su habilidad para reinventarse ha sido notable: tras el boom de popularidad que le dio aquel personaje de padre cuarentón de las tres "chancletas", Puig hizo papeles en televisión y cine, para luego volcarse al teatro, donde se consagró como actor dramático y luego como director, labor que le ha valido un premio ACE –el más importante del teatro argentino–, y por el que está nominado nuevamente este año por la obra El quilombero.
Grande, pa! ha sido la ficción más vista en Argentina. ¿Cómo fue seguir tu carrera tras ese éxito?
Cuando terminó Grande, pa! estuve tres años sin trabajar. No me llamaban, pensaban que estaba demasiado identificado con el personaje o que seguía contratado por el canal Telefé, que no era cierto. Me ofrecieron hacer teatro, pero todos las propuestas eran comedias iguales al programa, y dije que no.
¿Te pesaba eso?
Un día íbamos caminando por la calle con el actor Juan Leyrado y pasó un taxista que nos gritó: "¡Grande, pa!", y yo dije "Uy, ¡me tienen podrido con eso!". Y ahí Leyrado me dijo: "Lo que pasa es que Grande, pa! se ha convertido en una especie de saludo de buena onda. Lo usaron para la política, para el fútbol, el deporte... todo lo que significara algo bueno". Y eso, más o menos, me conformó. Años después me encontré con un muchacho que pidió sacarse una foto conmigo y me dijo: "Soy huérfano, y para mí vos fuiste mi padre. Con la serie me sentía protegido, identificado". Me pidió un abrazo y se puso a llorar desconsoladamente. Ahí me di cuenta de que debía estar orgulloso y feliz de haber hecho el programa más visto de la televisión argentina.
¿Cómo decidiste dar el paso para debutar como director?
Tenía ganas desde hacía tiempo. En las obras en las que yo actuaba participaba mucho, intercambiaba opiniones con el director. Por suerte me tocaron directores muy abiertos que aceptaban mis sugerencias. Y un día el productor Gustavo Yankelevich, el mismo que me convocó para Grande, pa!, me pidió que leyera una obra francesa cuyos derechos había comprado, Le Prénom. Me pareció bárbara, pero no entendía qué personaje quería que interpretara yo y me dijo: "No quiero que actúes, quiero que la dirijas, ¿te animas?". Le dije que sí, y después de eso quedé como director fijo con él. Y me fue bien, me gustó. Me sentí muy cómodo en el nuevo rol.
El director que antes fue actor tiene otra cabeza; sabe lo que es estar del otro lado.
Claro. Yo sé perfectamente lo que pasa, entonces cuando dirijo les planteo a los actores que tengo una idea sobre la puesta, pero que estoy abierto a que me digan qué piensan ellos y si se sienten cómodos con los movimientos que les marco. Cuando actué en El precio junto a Antonio Grimau, había una escena que no nos salía demasiado bien, que la había marcado la directora. Ya habíamos estrenado, y Antonio me dijo que esa escena lo tenía trabado, que no se sentía cómodo. Le propuse algunas cosas y la cambiamos un poco. Después me dijo "¡Ahora la escena me sale bárbara, me siento brutal! Vos tenés que dirigir, Arturo". Por eso le dije que sí en seguida a Gustavo.
En Chile protagonizarás Nuestras mujeres. ¿Qué expectativas tienes del montaje?
Yo creo que va a tener muy buena repercusión. A mí me conocen por Grande, pa!, y entiendo que Guillermo Francella (también protagonista) es muy popular. La obra es excelente, estamos muy confiados en que va a andar bien. El otro día nos planteábamos si nos entenderán bien, por los modismos. Yo creo que sí.
Nuestras mujeres, del 7 al 10 de diciembre, a las 20 hrs en Teatro Nescafé de las Artes. Manuel Montt 032. Entradas desde $ 26.000 en www.ticketek.cl
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