Paula 1149. Sábado 7 de junio de 2014.

A través de varias entrevistas a djs locales que son furor en Europa, el documental We are sudamerican beats es el primero que narra la historia de la música electrónica chilena y que da cuenta de la gran valoración que esta tiene en el extranjero. Desde el 26 de junio en Cine Arte Alameda.

Iba a ser un docuficción, ese subgénero audiovisual que narra un hecho ficticio como si fuera un documental. El productor audiovisual Daniel Véliz quería contar la historia de una banda imaginaria, chilena, de fines de los 70, que habría influenciado el electropop ochentero del Cono Sur, desde Virus hasta Electrodomésticos. "Pero empecé a investigar y me di cuenta que no había nada sobre los orígenes de la música electrónica chilena", dice Véliz. Entonces replanteó su proyecto y decidió contar la historia de la música hecha por máquinas en Chile.

We are sudamerican beats, cinta que se estrena el 26 de junio en el Cine Arte Alameda (Av Libertador Bernardo O'Higgins 139), muestra un resumen de la historia de la electrónica chilena y los hitos que marcan la valoración que tiene fuera. "Porque la electrónica es la vertiente más destacada de la música chilena fuera de nuestras fronteras, eso es un hecho", dice Véliz, que viajó durante dos meses para entrevistar a una veintena de músicos, productores y djs chilenos de renombre en 15 países de Europa, Norte y Sudamérica. En los 70 minutos de duración desfilan los principales embajadores de la electrónica en el exterior, como Luciano y Ricardo Villalobos en Ibiza, Jorge González en Berlín, Dandy Jack en Seix (Francia) y Alexi Délano en Nueva York.

¿Cómo nace la conexión de los músicos chilenos con Europa?

Es innegable el tema político; tanto Alexi Délano, Ricardo Villalobos y Dandy Jack son hijos de exiliados que vivieron en Europa. Además, hicieron buenas migas con artistas como Jorge González, Carlos Cabezas o Miguel Conejeros (Fiat600). Como dice Chica Paula en el documental, los músicos locales tuvieron la suerte de dar con gente que estaba haciendo muy buena música en el momento y en el lugar indicado.

¿Y son realmente tan respetados los djs chilenos fuera o es parte de un mito?

Son más respetados de lo que creía. Vi un show sorpresa de Luciano en la Estación Francia de Barcelona en el marco del festival Sonar y, cuando terminó, costó mucho sacar a la gente del lugar, querían que siguiera. También vi un show sorprendente de Felipe Valenzuela en el Robert Johnson de Frankfurt, uno de los clubes más renombrados del mundo.

Acá no se da el mismo fenómeno…

Chile funciona muy bien como semillero. Pero la diferencia es que en las fiestas de acá la gente no va por el productor o el dj, va por el estatus, por estar cerca de los famosos.