Cómo hacer “Ginger Snaps”
Son galletas de jengibre, pero más dulces y crujientes. Se les llama así en la tradición norteamericana para estas fiestas. Daniel Glukman cuenta que el secreto para que queden grandes y agrietadas es dejarlas en el horno hasta 12 minutos, momento en el que la masa quedará crocante por fuera, pero se derretirá en la boca. Van con sal para potenciar el sabor del jengibre, la nuez moscada y el clavo de olor, y siempre se pueden decorar con azúcar gruesa o azúcar flor.
Ingredientes:
–para 24 galletas–
· 456 gr de mantequilla sin sal, a temperatura ambiente
· 600 gr de azúcar rubia de caña
· 66 gr de melaza
· 114 gr de huevo, o 2 unidades
· 1 cda y 1 cdta de extracto de vainilla
· 770 gr de harina sin polvos de hornear
· 1 cda y 1 cdta de bicarbonato
· 2 cdta de sal
· 10 gr de jengibre
· 4 gr de canela
· 4 gr de nuez moscada
· 4 gr de clavos de olor
· 170 gr de jengibre confitado y picado –opcional, disponible en tostadurías–
Preparación:
1. Precalentar el horno a 200ºC. Cremar la mantequilla, la melaza y el azúcar por cerca de 2 minutos hasta lograr una mezcla pálida y voluminosa. En otro bowl combinar el huevo, vainilla y sal.
2. Cernir la harina, polvos y especias.
3. Agregar primero la mezcla de mantequilla a la de los huevos, hasta lograr una crema. Luego, incorporar la harina en tercios. Finalmente añadir el jengibre cristalizado. Separar la mezcla en 2 y refrigerar al menos por una hora o de un día a otro.
4. Estirar la masa sobre un silpad o mesón enharinado hasta alcanzar un grosor de 6 mm. Enharinar el cortante –con la figura de preferencia– antes de cada corte, luego marcarlo suavemente en la masa y retirar la galleta. Decorar con azúcar gruesa en cristales, mostacillas o sprinkles.
5. Hornear por 12 a 15 minutos para que queden crujientes. La masa crecerá y luego colapsará sobre sí misma, haciendo pequeñas grietas.
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