De temporada: Carpaccio de cítricos y puerro asado
Contienen agua, por lo que ayudan a mantener la hidratación del cuerpo y la piel en verano. Son altas en vitaminas y minerales. Aportan fibra y proteínas antioxidantes, por lo que son capaces de proteger al organismo de ciertas enfermedades degenerativas y cardiovasculares. La mayoría de las frutas contiene fibra, por lo que ayudan a regular la función intestinal y previenen el estreñimiento. Pero por más beneficiosas que sean, todavía existe mucha mitología en torno a los beneficios que tienen en nuestra dieta.
Se dice que tienen altos niveles de azúcar, que engordan y que comerlas después de las seis de la tarde puede ser perjudicial, pero ninguna de esas afirmaciones es cierta. Y es por eso que pueden ser grandes aliadas del verano, solo tenemos que saber comerlas. "Independiente de la hora a la que se consuman, el proceso digestivo es el mismo", dice la nutricionista Camila Cuevas, del centro de nutrición integral Nutrirme. "La fruta de verano es rica, refrescante y nos hace bien, pero como con todo hay que tener cuidado de no abusar", agrega.
Lo ideal según los especialistas es comerla fresca y no exprimirla. "Por ejemplo, solo para hacer un jugo necesitan siete naranjas que reducidas a líquido pierden su fibra", explica la la nutricionista Danica Sperlingdel. "La fruta sola y en grandes cantidades nos reduce la posibilidad de comer otros alimentos durante el día y de balancear los aportes de cada una. Pero como complemento son un gran aliado". Pensando en dulce y salado, preperamos siete ricas recetas hechas con frutas de la estación.
Carpaccio de cítricos y puerro asado
(Para 2 personas)
Tiempo de preparación: 25 min.
Tiempo de reposo: 60 min.
Ingredientes
2 pomelos enteros en rodajas
3 limones enteros en rodajas
3 limas enteras en rodajas
2 puerros
1/2 taza de crema ácida
1/2 pepino pelado en rodajas
2 cucharadas de vinagre de arroz
1/2 taza de granada pelada
1/2 taza de hojas de cilantro
1 cucharadita de jengibre
5 cucharadas de aceite de oliva
Sal
Pasos
1. Cortar los puerros en rodajas, aliñarlos con aceite de oliva, sal y pimienta, para luego dejarlos refrigerar (ya aliñados) por una hora. En paralelo precalentar el horno a 200 ºC para después llevar los puerros al horno y cocinarlos por 10 minutos, hasta que se doren.
2. Reservar.
3. En un bol poner la crema ácida, el vinagre, el cilantro, el aceite de oliva, la sal, y el jengibre.
4. Revolver y reservar.
5. Montar las rodajas de pomelo, los limones, las limas y el pepino cortado en forma circular en un plato plano y grande.
6. Aliñar con la mezcla de salsa ácida por encima, luego agregar los puerros, la granada y terminar con leves toques de aceite de oliva y un puñado de sal de mar.
7. Refrigerar por 10 minutos antes de servir.
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