"La cuarentena ha tenido distintos momentos, algunos buenos y otros no tanto. Al principio fue muy intenso por la nueva carga laboral. Además, mantener la casa medianamente ordenada, lavar la ropa y cocinar.
Si bien todas las tareas las hacemos a medias con mi pareja, al agregar el trabajo y una hija de esta edad, que no puedes dejar de mirarla ningún segundo, la carga se hizo cuesta arriba. Y sigo durmiendo mal, porque mi hija todavía toma papa y se despierta muchas veces en la noche. ¡Me di cuenta a través de las fotos que estoy despierta todas las horas del día!
Pero han habido cosas muy lindas. La Victoria ha crecido muchísimo en este período, tanto así que cuando partió la cuarentena solo sabía sentarse y en estos meses aprendió a gatear y a caminar, lo que implica un mundo completamente nuevo de exploración.
Ha sido una tremenda suerte estar con ella todo el tiempo. Después de esos primeros meses difíciles, nos acostumbramos al nuevo escenario, logramos organizarnos y empezó a venirnos muy bien estar los tres encerrados. Por supuesto echo mucho de menos a mi mamá, a mis hermanas, a mi hermano, a la familia de mi pareja, pero creo que hemos tenido suerte de estar en la casa los tres.
También nos pasó que estuvimos los primeros meses de la cuarentena fuera de Santiago, donde podíamos caminar por un cerro donde veíamos caballos y otros animales, lo que para la Victoria fue muy bonito, ya que tuvo la suerte de poder estar al aire libre y hasta aprendió a imitar los ruidos de los animales.
Valoro poder estar en mi casa, porque nunca antes había podido estar tanto aquí. Suena raro porque si bien es el lugar más propio, uno en general pasaba más en el trabajo y la oficina. ¡A mí me encanta mi casa! Pero, sobre todo, valoro poder estar así de cerca de mi hija. Eso es un privilegio gigante.
Siento que la pandemia ha sido como una prueba dura de enfrentamiento al modo de vida y me alegro de haber podido encontrarme con una vida que me gusta".
Emilia Edwards (@laquesacalafoto) vive con su pareja y su hija Victoria, quien tiene un poco más de un año.
