Paula 1123. Sábado 25 de mayo 2013.
El láser es uno de los tratamientos dermatológicos más demandados para rejuvenecer la piel. Su efecto tensor y alisador ha servido de inspiración para que la industria de la cosmética esté en constante búsqueda para dar con fórmulas que emulen sus rejuvenecedores resultados.
Hay consenso en la comunidad dermatológica que el uso de la tecnología láser para rejuvenecer la piel es una de las mejores y más cotizados técnicas para alisar arrugas y líneas de expresión, aumentar la firmeza y elasticidad y mejorar su tono. La aplicación de la energía actúa en la epidermis (capa superficial de la piel), produciendo una descamación que estimula el nacimiento de piel nueva. El calor también llega a la dermis (capa intermedia de la piel) para contraer las fibras de colágeno y lograr un efecto tensor. Aunque luego de una sesión se ven resultados, se requieren unas cuatro sesiones separadas por tres semanas cada una para lograr el objetivo final.
Por lo general se indica este tratamiento para mujeres mayores de 40 años, aunque, si una piel presenta demasiado fotodaño o envejecimiento por el cigarrillo, se puede realizar antes.
Este proceso, que actúa en la dermis regenerando el colágeno y la elastina –que comienza a deteriorarse desde los 30 años– es el que ha llamado la atención de la industria cosmética, la cual ha combinado una serie de activos para emular el efecto rejuvenecedor del láser en la piel. La pionera en hacerlo es L'Oréal Paris, que dio con una fórmula extraída de la naturaleza para lograr reducir arrugas, mejorar la densidad de la piel y su relieve.
Fórmula láser: ciencia de la naturaleza
"En 1998, el químico norteamericano Paul Anastas introdujo el concepto de química verde, que implica reducir al mínimo la contaminación y el impacto en la naturaleza que pueden provocar los métodos de investigación. Inspirado en ello, nuestros laboratorios utilizaron el aserrín de la madera de árboles ya cortados para extraer la xilosa, una azúcar contenida en la fibra de la madera. Este compuesto daría paso a nuevas formulaciones que hoy permiten introducir el Pro-Xylane, una molécula cuya acción estimula la síntesis de elementos dérmicos y epidérmicos estructurales, que aumentan el proceso de regeneración del tejido dañado con el paso del tiempo", dice Patricia Pineau, ingeniera química y directora de comunicación científica de L'Oréal, quien agrega: "Este componente, junto al ácido hialurónico fragmentado, que penetra en la profundidad de las arrugas, y al LHA, ingrediente que tiene una acción pro descamación, favorece la regeneración epidérmica, realizando en la piel un efecto similar a la acción del láser".
"Desde los 30 años, las fibras de colágeno y elastina se van deteriorando. Y, aunque es imposible evitar este proceso, sí se puede retardar. La cosmética brinda múltiples soluciones que se deben complementar, antes que todo, con una alimentación saludable y ejercicios", dice la ingeniera química y directora científica de L'Oréal, Patricia Pineau.