¿Qué querías ser cuando eras chica?
Pasé por varias etapas. Quise ser abogada, luego ingeniera civil químico y también ser dueña de un banco, pero terminé estudiando ingeniería comercial. Sólo cuando trabajé en el Servicio de Impuestos Internos es que sentí que quería algo más creativo, y logré encontrar lo que realmente me gustaba varios años después. Hace cuatro, específicamente, cuando creé junto a mi socio, Felipe Díaz, La Casa de Juana.
¿Cuál fue el mejor consejo de negocio que te dieron cuando partiste?
La paciencia y la confianza son dos palabras que me recalca constantemente Martín, mi marido, y que tienen que ver con la actitud y las creencias. Hay que creer en uno mismo y en el equipo que uno forma, y tener una actitud positiva frente a las dificultades. Siendo paciente y confiando firmemente en que con el tiempo aquello que buscas, llega.
¿Cuál ha sido la lección más importante que has aprendido?
"Te la crees" es una frase que usamos mucho en nuestro equipo. Es de nuestro asistente de producción, Jaime, que tiene una actitud súper positiva frente a todo. Creo que esas palabras son clave. Transmiten algo realmente básico, pero que a veces olvidamos, y es que uno debe tener la convicción de que va a funcionar, de lo contrario no tiene sentido avanzar.
¿Qué logro es el que más te enorgullece?
En términos profesionales, ver al equipo y en lo que se ha convertido la marca es un enorme orgullo. Éramos dos creyendo en una idea y hoy somos más de veinte, entre ejecutivos, asistentes, decoradoras, abogados, colaboradores del blog. Ha sido un tremendo trabajo, y haber podido liderar todo esto con Felipe me hace sentir capaz de hacer muchas cosas más. Además, la comunidad que armamos y el trabajo colaborativo entre marcas fue una buena idea y un enorme beneficio para todos. Ahora, en términos personales, mi orgullo es mi familia. Sin ellos, nada del resto funciona.
¿Qué es lo que más te gusta de tu espacio de trabajo?
Después de buscar mucho, encontramos una casa que se apegaba a nuestro estilo, con piso de parquet, linda luz y buenos espacios. Acomodamos el living comedor para el equipo entero, así que se genera un buen ambiente, con mucho trabajo colaborativo, donde todos somos importantes y aportamos desde lo que creemos y sabemos. Eso es lo que más me gusta: armar comunidad.
¿Qué ritual, objeto o rutina no puede faltar en tu día laboral
Soy lo peor para las rutinas. No logro generar horarios, pero algo que nunca me falta son los libros de decoración. Siempre tengo revistas o libros a mano, entonces cuando quiero parar un rato de tanto mail, llamado o WhatsApp, un café y una buena revista me ayudan a seguir.
¿Qué mujer te inspira?
Me cuesta buscar una en específico, porque me encanta el trabajo de decoración que hacen varias. También hay muchas mujeres empresarias que tienen un enorme talento y tremendas historias de vida, pero creo que lo más inspirador en el día día está más cerca de lo que uno cree, cuando andas por la calle, metro o micro, y ves a muchas mujeres aperrando día a día con sus familias, solas o acompañadas. Ahí hay lección de vida para todos.
Genias es una comunidad para mujeres creativas que trabajan en lo que aman. Pueden estar armando su emprendimiento, evaluando nuevas opciones laborales o simplemente buscando inspiración y compañía para sus día a día. Hacemos asesorías, talleres, charlas, y tenemos un blog y una guía de profesionales.