Ingredientes
½ taza de quínoa
Sal y pimienta negra, recién molida
2 cucharadas de aceite de oliva
4 cucharadas de pimentón rojo, sin semillas y en cubos pequeños
2 cucharadas de cebollín, picado fino
4 cucharadas de zapallo italiano, en cubos pequeños
2 tazas de granos de choclo congelados, descongelados
1 taza (240 ml) de leche
4 huevos
5 hojas de albahaca, lavadas y picadas
Mantequilla para enmantequillar
1/3 taza de queso provoleta, rallado
Agua hirviendo
Granos de choclo, cocidos y hojas de albahaca para decorar
Preparación
1. En un colador lavar los granos de quínoa bajo el chorro de agua fría y estilar. En una olla colocar la quínoa, cubrir con 1/2 taza de agua fría y agregar sal a gusto. Cocinar a fuego bajo hasta evaporar todo el líquido y retirar del fuego; transferir a un bol y dejar enfriar.
2. En un sartén pequeño calentar el aceite a fuego medio-alto, agregar el pimentón, cebollín y zapallo italiano; saltear, revolviendo, 4-5 minutos o hasta que las verduras estén ligeramente doradas. Sazonar con sal y pimienta. Retirar del fuego, añadir las verduras al bol con la quínoa y mezclar.
3. En un recipiente colocar el choclo y la leche; con la ayuda de una mixer manual procesar hasta obtener un puré homogéneo, también se puede preparar en la licuadora. Agregar los huevos y la albahaca; sazonar con sal y pimienta y procesar 1 minuto más.
4. En pocillos individuales enmantequillados distribuir la mezcla de quínoa, verter encima el puré de choclo y espolvorear con el queso rallado. Colocar los pocillos en una budinera y verter agua hirviendo hasta cubrir la mitad de los pocillos. Hornear a bañomaría 20-25 minutos o hasta que estén dorados. Retirar del horno y servir de inmediato decorados con granos de choclo y hojas de albahaca.