Hilos de América

Paula 1123. Sábado 25 de mayo 2013.

Una exposición de textiles americanos que no hay que dejar pasar. Hasta el 26 de julio en el Centro Cultural La Moneda.

Tejidos alucinógenos

Shipibo-Konibo es una comunidad indígena que habita la Amazonia peruana y venera a la anaconda porque considera que su piel posee todos los diseños sagrados. En ella se inspiran al momento de tejer sus particulares textiles, una práctica que realizan a modo de ritual: mientras tejen consumen ayahuasca, y las visiones que genera el brebaje preparado con la raíz de esta planta alucinógena son los que marcan la pauta de los diseños de las telas. Por eso los textiles para estos indígenas tienen un gran poder curativo: cada diseño representa las visiones de la persona que lo viste y, en caso de caer enfermo o sufrir una dolencia, el chamán de la tribu es capaz de interpretar el secreto de la sanación que está plasmado en la tela.

El hupil azteca

Detrás del hupil, una de las prendas más comunes que visten las mujeres de la cultura azteca, sobre todo en México y Guatemala, se esconde un significado sagrado. Al ponérselo, la cabeza emerge simbólicamente a través del orificio del cuello, que representa el centro del mundo, y lo rodean motivos del universo que se extienden sobre las mangas y el resto de la pieza, formando una cruz abierta en la que la cabeza de la mujer representa al cielo del mundo.

La trama y la urdimbre son los dos grandes temas en torno a los cuales está organizada la exposición, como metáfora de los entramados sociales donde la urdimbre es la base de la sociedad y la trama donde se desarrollan los planos expresivos, lúdicos y festivos de las sociedades tradicionales.

Hazme si puedes

Originaria de Oaxaca, uno de los estados mexicanos de mayor tradición textil, es la técnica de bordado que caracteriza a un tipo de vestidos de niñas como el que se ve en la foto. Para realizarlos, las familias que los bordan desarrollaron un método de plisado tan complejo, que por eso fueron bautizados Hazme si puedes. Siempre llevan el nombre de la que será dueña del vestido, y los niños tomados de la mano simbolizan la unidad familiar.