La Luna nueva en Tauro ocurrirá en el grado 21 de ese signo, el día martes 11 de mayo. Estos eventos lunares se relacionan con nuevos comienzos y aperturas. Los ángulos tensos que hemos vivido en el cielo, especialmente la semana pasada, nos han puesto los pies en la tierra para comenzar a aventurarnos hacia un nuevo camino. Viejas capas de nosotras se están empezando a desprender, demostrándonos que hemos crecido, que el cambio es inevitable y que no volveremos atrás.

Tauro es el signo que nos llama a conectarnos con la certeza del aquí y el ahora, para comprender cómo percibimos y cómo sentimos. También nos conecta con la experiencia de la materialidad, es decir, con cómo nos relacionamos con las cosas que nos importan y valoramos. El cuestionamiento sobre lo que nos entrega goce y comodidad también es importante, pues es algo que ha ido cambiando con ganas desde 2019.

Esta Luna nueva hará casi 90 grados a Júpiter, que se despedirá este viernes del signo Acuario para hacer una breve pero potente pasada al signo de Piscis, y dará el patadón a una temporada de eclipses llena de aprendizajes. Estaremos conectando con una energía completamente nueva, comprendiendo desde nuestra alma que es lo que es necesario darnos para poder conectar con la vida.

Están apareciendo nuevas herramientas en nuestro horizonte que nos permiten adaptarnos de otra forma a la realidad. Desde el quiebre, el cansancio y el dolor, podemos hacernos preguntas diferentes, respondiendo distinto a los estímulos del pasado, dándonos cuenta cuánto hemos sanado.

Esta Luna nueva nos llama a retirarnos hacia el interior. Se le ha llamado erróneamente “energía femenina” al poder de conectarnos con el lugar más intuitivo de nuestra consciencia, al espacio menos práctico y más cíclico. Esta energía no es lineal, no tiene un objetivo, no tiene un término. ¿Cómo habitas esta energía? ¿Permites que fluya en ti o siempre estás pensando en lo próximo que debes hacer?

Escúchate esta semana. Escúchate sin miedo, sin juicio, sin crítica. Tu interior te está llamando a decir en voz alta algo, con mucha fuerza. Dale atención a tus sensaciones corporales, a tu energía, a cómo estás nutriendo el vehículo que te lleva a percibir la experiencia. Que la mente sea tu herramienta para poder descifrar esta semana, no quien comande todo lo que pasa en tu vida. Suelta y escucha.