Hay dos tipos de bebedores de té en bolsa. Los que después de un uso la tiran a la basura y los que la comparten e incluso usan hasta cuatro veces antes de tirarla. La mayoría de las bolsas están hechas de papel con una pequeña composición plástica, por lo que son aptas para el reciclaje y el compostaje. Acá proponemos cinco formas de reutilizarlas antes de que sean basura.
- Para el contorno del ojo: Las bolsas de té sirven para reducir las ojeras y desinflama los ojos. Esto, gracias a sus propiedades antioxidantes que estimulan la circulación de la sangre alrededor de la zona.
- Para el ardor de zonas recién rasuradas: A veces las rasuradoras nuevas dañan la piel de las piernas, la cara o las axilas, y dejan una huella roja y mucho ardor. Pasar una bolsa de té por la zona afectada ayudará a aliviar el dolor y a bajar la intensidad del rojo.
- Acondiciona tu pelo: De vez en cuando, puedes cambiar tu acondicionador habitual por un jarro de té frío suave. Si estás con problemas de caída del cabello, usa té verde y si quieres fortalecerlo, té negro. No es magia, sino que son resultados asociados a los antioxidantes, aminoácidos y propiedades antibacteriales del té.
- Mejora el estado de tus plantas y flores: Regar tu jardín con té suave ayudará a revitalizarlo, gracias a la cafeína.
- Prepara jabón casero: Si sueles hacer jabones en tu casa –solo necesitas aceites esenciales y moldes de silicona- aprovecha las propiedades antibacteriales del té y su aroma para darles un toque especial.