Ser auténticos es mostrarse tal cual somos sin ocultar nuestra esencia. En Terapia de la Gestalt, el filósofo Fritz Perls postula que la autenticidad se concibe como la actitud o disposición que adoptamos en cada situación, para explotar nuestro potencial humano o cuando somos capaces de expresar lo que sentimos. “El concepto de ser auténticos tiene sus orígenes en el postmodernismo, sin embargo, la mirada actual trata sobre las identidades múltiples que se define como la presencia de una o más identidades en el sujeto. En este proceso, el actor social le da significado a los sucesos y estos van siendo coherentes con su vida”, explica la vicepresidenta del Colegio de Psicólogos de Chile, Isabel Puga.
“En una relación romántica, conectar con el otro y crear un espacio de confianza es generar un nivel de autenticidad’', dice la experta y agrega: “la autenticidad en una pareja es conectarse, ser empáticos, comunicarse, entender lo que le pasa al otro y contener. Esto permite generar espacios de confianza y se genera un vínculo importante”. Puga explica que la única forma de poder conectar con otro y de que otro conecte con uno es siendo auténtico.
La psicóloga estadounidense Nicole Lepera, dice en su libro How to Do the Work: Recognize Your Patterns, Heal from Your Past, and Create Your Self, que las relaciones son nuestro espejo y que la autenticidad en la pareja es un viaje de conciencia profunda que tiene relación con las metas que se proponen en conjunto. Este camino a ser únicos y reales como pareja puede significar un constante descubrimiento, porque lidiamos con lo que ya somos -nuestros temores o virtudes- y la manera en cómo nos presentamos al otro.
Así lo explica la psicóloga clínica Mariana Gangas, quien cuenta que ve con frecuencia casos de parejas que no son honestas al comienzo de su relación y por lo tanto, no son auténticas. “La primera etapa es de seducción y galanteo, donde cada persona muestra su mejor versión, tratando de ser aceptada y querida por el otro. Por nuestra cultura o sociedad, creemos que debemos ser otra persona para sentirnos queridos y aceptados, cuando en realidad, la honestidad conmigo mismo y con el otro, es clave”.
Y es que el hecho de ser reales afianza la conexión emocional y los pilares fundamentales para que toda relación prospere, comenta la psicóloga. Según Ganges, “ser auténtico y mostrarte como eres, decir lo que piensas o sientes es lo que permite crear una relación sana y ayuda a evitar desencuentros a futuro con la pareja”. Añade que si el individuo garantiza ser tal cual es frente al otro, no necesita sostener ni crear una máscara falsa, dado que por sí mismo ya es una persona transparente. Y aclara que sin autenticidad no existe un encuentro real con la pareja, porque solo así eres aceptado y amado por tu verdadera esencia.