Paula 1141. Sábado 15 de febrero de 2014.

Estilista por accidente, el inglés Eugene Souleiman es una celebridad en el mundo de la moda; cada vez que pone las manos sobre una cabeza, crea una pieza de moda y arte. Acá, su historia.

Ha pasado un mes desde la última Semana de la Moda de la Alta Costura de París y el trabajo del hair stylist Eugene Souleiman (52) para la casa italiana Schiaparelli sigue generando posteos y comentarios. Y es que su trabajo fue, una vez más, alucinante e inspirador. En el desfile, Souleiman mostró pelos multicolores, algunos extra voluminosos, otros rectos y muy lisos, brindando un espectáculo que dejó en claro que el pelo es, para él, material y soporte para crear una propuesta visual innovadora en los terrenos de la moda y las tendencias, pero que también coquetea con el arte.

Más que un estilista, a estas alturas Souleiman es una estrella, un rock star del pelo, con su visión puesta en cientos de portadas para las revistas W, Vogue Interview; otros cientos de producciones de moda; y las campañas de una larga y disímil lista de marcas: Belmain, Givenchy, Valentino, Tommy Hilfiger, Dolce & Gabbana, H&M, Calvin Klein. Para todos ha creado una propuesta única. El éxito de Souleiman radica en su genialidad, en su oficio, en su libertad e innovación. Nunca se copia a sí mismo. Siempre sorprende.

Su nombre pesa a tal nivel que figuras del pop como Björk y Lady Gaga han elaborado sus looks junto a Souleiman, y el artista visual Dinos Chapman lo entrevistó como un igual para Interview. Antes, en 2003, ya habían trabajado juntos en un montaje de la galería Saatchi, de Londres. ¿Cómo un ex estudiante de Arte de Goldsmiths se transformó en una estrella de la moda? Según ha contado, su carrera partió a mediados de los 80, cuando estando cesante fue a buscar trabajo a un "job center" y luego de completar el formulario le dijeron que tal vez podría ser un gran estilista. Estudió dos años de estilismo antes de transformarse en discípulo de Vidal Sassoon (1928-2012), el también inglés al que se le adjudica el corte geométrico inspirado en el movimiento Bauhaus. Sassoon, sin duda, marcó su mano y forma de encarar el mundo de la moda. El antes y después se produjo en 1995 cuando trabajó en la campaña primavera- verano de la diseñadora alemana Jil Sander.

"La gente debería divertirse con su pelo. Crece y cambia todo el tiempo. Y es solo el pelo", dijo Souleiman en vogue.com

Como un rockero −así también era definido Sassoon−, Souleiman trabaja con un staff de ochenta peluqueros. Con ellos se mueve entre Londres, donde tiene su departamento, París y Nueva York para hacer pasarelas, campañas y editoriales. "Cada vez que estoy frente a un pelo me inspira lo que la gente percibe como mal gusto. Porque el buen gusto es solo buen gusto. No hay sorpresas", dijo Eugene Souleiman para Interview.