Lieve Dannau, un nombre extraño. casi cinematográfico o perfecto para una modelo de alto vuelo. Su padre es belga y quiso darles vuelo. Su padre es belga y quiso darles a sus tres hijos un nombre flamenco. A ella, la del medo, le puso Lieve, que significa "dulce".
Mide 1,79 m y su cara está repleta de pecas; una particular belleza que ocupó la portada de la penúltima edición de Paula. Está en cuarto medio en la Alianza Francesa y, además de modelar (comenzó recién el año pasado), canta (y muy bien). Lo demostró en Shangai en noviembre pasado, cuando en la noche de los talentos, de la versión 28 del concurso Elite Model Look International, interpretó sobre el escenario –con un vestido negro corto con brillos y zapatos ultra altos– Rolling in the deep, de la inglesa Adele, impresionando al jurado. El mismo que, días después, tras haber pasado por extensas sesiones de fotos, filmaciones, pruebas de vestuario, maquillaje y clases de pasarela, le informó que era la ganadora del tercer lugar del certamen. El primero se lo llevó la sueca de 15 años Julia Schneider; el segundo, la checa de 18, Lenka Hankova.
Antes, otras dos chilenas hicieron historia en el Elite, obteniendo ambas el segundo lugar. En 2001 fue Renata Ruiz y en 2009, Josefina Cisternas.
Lieve firmó hace unas semanas contratos para trabajar en París y Londres durante un año. Frente a esas posibilidades desconocidas que se abren a sus pies, dice sentirse "ansiosa por viajar por el mundo y llegar a desfilar para grandes diseñadores". Una ansiedad más que comprensible. Elite ha sido el trampolín de modelos estrella como Linda Evangelista, Heidi Klum y Gisele Bündchen, estas dos últimas, las mejores pagadas del mundo, según revista Forbes.
¿Cómo nace tu interés por la moda y el modelaje?
Siempre me ha gustado mucho. La veo como una expresión artística que evoluciona según las épocas. Me encanta vestirme y verme bien estando un poco a la moda, pero tampoco les doy mucha importancia a la ropa y al maquillaje. Creo que la belleza va más allá de tener ropa linda o estar bien maquillada. En cuanto a modelos, me gusta mucho la alemana Lara Stone.
¿Cómo te cuidas para estar bien para tu trabajo?
Hago bastante deporte. Me gusta el vóleibol y salir a trotar. Eso me mantiene bien física y mentalmente. Además, me alimento sano.
¿Cómo te preparaste para enfrentar el concurso en China?
Durante cinco meses tuve clases de pasarela con Lennox Douglas, modelo y bailarín. También me enseñaron tips para fotografiar bien y moverte cuando estás frente a una cámara. Eso te ayuda a soltarte y enfrentar bien los castings.
¿Me podrías dar un tip?
Siempre te dicen que aprendas a conocerte. Mirándote al espejo, viendo cuál es tu mejor pose y lado, y revisando tus fotos y filmaciones para aprender de los errores y mejorarlos. Hay que aprende a jugar con la cámara y sentirla como una confidente. En el fondo, cuando posas, también estás actuando.
¿Te ha cambiado la vida desde el concurso en China?
Hasta ahora todo sigue bastante parecido, lo que sí, esto me va a permitir trabajar y ahorrar. Acabo de llegar a Londres y voy a participar del Fashion Week de acá y de París, donde también iré a castings. Puede que todo sea diferente. Estoy ansiosa por descubrirlo.
¿Qué crees que le llamó la atención al jurado?
Tengo un look clásico y probablemente bastante francés. De hecho, la mayoría de los jurados franceses votaron por mí.
¿Estás dispuesta a dejar Chile para jugártela por una carrera afuera?
Ya he hablado de ese tema con mis papás y con la María de los Ángeles Paúl –directora de Elite Chile– y la idea es quedarme en Europa mínimo por un año si me va bien. Como estoy en la Alianza Francesa, incluso puedo terminar el colegio acá. Me siento súper preparada tanto emocional como físicamente. Soy bastante madura, responsable y cuento con todo el apoyo de mis papás y de Elite Chile.