Paula 1216. Sábado 31 de diciembre de 2016.
1. Hija de costurera: su mamá tenía su propio taller de costura. Aunque ni madre ni padre querían que se dedicara a eso, sí apoyaron que estudiara Diseño de Moda en el Instituto Europeo de Diseño en Roma, en el ranking 2016 de las 50 mejores escuelas del rubro según la revista The Business of Fashion.
2. Fin de una dupla: durante 27 años trabajó con el también diseñador Pierpaolo Piccioli. Partieron en la línea de accesorios de Fendi, en 1989, hasta que 10 años después Valentino los llamó, también para accesorios. En 2008, juntos se convirtieron en los directores creativos de la marca. Ahora, Piccioli en la firma italiana y Chiuri en la parisina, hacen por primera vez camino por separado.
3. Sus hitos: en Fendi trabajó en el diseño del famoso bolso baguette. En Valentino, diseñó la línea Rockstud, accesorios con aplicaciones de tachuelas, como los icónicos zapatos. Con Piccioli se opuso al minimalismo y desarrollaron un estilo detallista también en la ropa. Como directores creativos, sus colecciones estuvieron cargadas de encajes, tules, plisados y bordados, y patrones gráficos, especialmente de animales como mariposas y pájaros. En esa línea, en su primer desfile para Dior, Chiuri mostró bordados con motivos del tarot y el horóscopo, un guiño a las supersticiones del fundador de la marca.
4. Moda y cultura: para Chiuri la moda es cultura y como amante de la historia del arte, junto a Piccioli hizo para Valentino series inspiradas en los grandes movimientos artísticos. Desde la Roma antigua en la colección Couture otoño 2015, hasta la arquitectura medieval en la colección Couture otoño 2011, pasando por Warhol en la colección resort 2013, entre muchos otros casos. Su última colección para Valentino fue la Couture otoño 2016, cuyo tema fue el periodo isabelino y el renacimiento italiano. Para su debut en Dior, Chiuri incluyó detalles inspirados la obra de Dalí y Chagall.
5. Feminista: en su primera colección prêt-à-porter para Dior, que mostró en septiembre en el Museo Rodin, partió con looks inspirados en el esgrima: chaquetas de tejidos acolchonados y correas laterales, cuellos cisne y pantalones ajustados por encima de la rodilla. "En el deporte no se hacen distinciones de género, porque es la misma ropa para hombres y para mujeres. Quería reproducir este elemento en la moda", explicó. Pero el momento más instagrameado y tuiteado fue cuando aparecieron las poleras (foto) con mensaje #Weshouldallbefemenist (Todos deberíamos ser feministas), combinadas con polleras de tul y zapatillas.