Paula 1233. Sábado 26 de agosto de 2017.

Antón Chéjov | Tío Vania

"Vania es un viejo que se cuestiona las cosas que no lograste hacer en tu vida, de asumirse como uno es, del aburrimiento, del vacío, temas que con la edad aparacen ferozmente y que yo, a mis 37, estoy empezando a explorar. Mis hijos tienen 13 y un año y medio, y siento que recién estoy aprendiendo cosas. Espero llegar a la vejez sin ese vacío que siente Vania. Creo que lo estoy haciendo bien".

Alessandro Baricco | Novecento

"Monólogo que este italiano escribió en 1994 y que fue mi tesis de titulación de Teatro de la Universidad Católica. Cuenta la historia de un niño –Novecento– abandonado en un barco, quien es criado por marineros y quien se convierte en el mejor pianista del mundo. Cuando al barco lo van a dinamitar, Novecento, ya un adulto, se rehúsa a bajar y prefiere morir a bordo. Con esta pieza pienso en la cantidad de gente brillante que opta por un camino solitario y silencioso y que vive fuera de la convención social. Un acto de valentía. También pienso en la opción de la muerte como algo válido".

Roberto Parra | El desquite

"Llegué a la Casa Amarilla, un galpón en Estación Mapocho, a ver esta obra dirigida por Andrés Pérez, con el elenco de la compañía El Sombrero Verde, con María Izquierdo y Boris Quercia. El estreno fue en agosto de 1995, pocos meses después de la muerte de Parra. Con esta obra descubrí el talento de su dramaturgia: una historia aparentemente cotidiana del campo tradicional chileno, pero que trataba temas aún vigentes como el machismo y el patriarcado".

Ramón Griffero | Río abajo

"En 1995 tenía 16 años y me encantaba ir solo al teatro. Fui al estreno de esta obra al Teatro Nacional y me marcó: tenía una escenografía casi cinematográfica, con dos pisos donde había varios departamentos. Mostraba un Santiago muy crudo, muy off, con un provocador guión que hablaba de amor, drogas y asesinatos. Griffero hacía una analogía de una sociedad que se estaba transformando y, con ella, yo descubrí su genialidad".

Tennessee Williams | El zoológico de cristal

"Es uno de los grandes dramaturgos norteamericanos, tanto, que la mayoría de sus obras se han llevado al cine, como Un tranvía llamado deseo y El zoológico de cristal, con una increíble dirección de Paul Newman. Es el primer clásico que dirijo y es un placer hacerlo porque está muy bien escrito. Incluso hoy, a más de 70 años de su estreno, la gente engancha con este drama familiar que sigue teniendo vigencia. Eso es lo bonito de los clásicos: unos los pone en escena, los hace dialogar con el presente y la obra respira a través de este para que el espectador la reciba con el mismo ánimo que décadas atrás".