Paula 1247. Sábado 24 de marzo de 2018. Especial Moda.
La firma de vestuario femenino podría convertirse en el Prada o Miu Miu del futuro italiano.
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Fotografía: Attico.[/caption]
Gilda Ambrosio y Giorgia Tordini, con su firma de vestuario femenino Attico, han ganado rápidamente la atención de la prensa internacional y la adoración de la industria de la moda, además de alcanzar éxito de ventas en solo dos años de funcionamiento. Razones suficientes para sacarme el sombrero ante ellas. Para mí, su éxito radica en una propuesta fresca, coherente y actual. Una mezcla perfectamente controlada entre el glamour old Hollywood, la exuberancia italiana y la elegancia clásica.
Su concepto contemporáneo se basa en el equilibrio entre el glamour y la decadencia, con toques nostálgicos del vintage y el grunge. Atemporal y auténtico, es el resultado estético de piezas creadas a través de paletas incómodas y telas ricamente ornamentadas bajo un sentido audaz de la opulencia. Inspiradas en kimonos, papeles murales y batas de baño, nace una marca cuyo lenguaje y universo hablan claro.
Attico tiene un enorme potencial de expansión. Está dentro de los nombres que 'hay que mirar' y perfectamente podrían convertirse en el Prada o Miu Miu del futuro italiano.
La dupla adquirió notoriedad en 2014 como influencers y figuras del street style, con una primera aparición en Vogue Italia con fotografías de Phil Oh. Aunque sus gustos son muy distintos (Gilda es audaz y ecléctica, y Giorgia, minimalista y clásica) en 2016 unieron sus fuerzas en Attico, lanzada en la semana de la moda milanesa, en un ático de Viale Bianca María, una de las zonas más burguesas de la ciudad. Instagram: @the_attico
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La diseñadora de vestuario y dueña de la marca homónima, estudió en el Instituto Marangoni, en Milán.
Instagram:
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