Mirada Paula: maxicollares vintage
Lisette Ávila es periodista y hace algún tiempo retomó su afición por hacer joyas inspiradas en la estética de los años 60 y 70. Sus collares son una expresión de color y maximalismo que aportan un sello único a quien se atreva a usarlos.
Lisette he trabajado toda su vida generando contenidos para medios de comunicación y actualmente para marcas. Felizmente, gracias a su carrera, ha podido conocer distintas realidades, lugares y personas del mundo del arte, la cultura y la moda, que me la han inspirado en su forma de vestir, decorar y crear.
Pese a que el periodismo ha sido su gran pasión, hay otra que cultivó su mamá desde que era pequeña: el arte de hacer joyas. Con ella aprendió, a modo de juego madre e hija, a confeccionar aros, prendedores y collares de cerámica en frío. “Recuerdo que el comienzo de un nuevo proyecto manual (así los llamaba ella) era todo un ritual que comenzaba con la compra de los insumos en los clásicos locales de la calle 21 de mayo, en el centro de Santiago; continuaba con la confección de las piezas de cerámica en frío, y culminaba con la pintura y decoración de cada pieza que creábamos”, recuerda Lisette, quien finalmente vendía las joyas creadas en una mesita de madera, fuera de mi casa junto a mi amiga Loreto. Con lo que ganaba se compraba dulces y esquelas.
Ahora que su madre murió y buscando sentirla a su lado es que quiso retomar la confección de joyas como una terapia para enfrentar su muerte, la de su hermana mayor y de su mejor amiga. “Sé que a través de las manualidades me conecto espiritualmente con esas mujeres importantes de mi vida, con las que también compartí el amor por el trabajo artesanal y dedicado”.
Las joyas que ha comenzado a confeccionar a sus 44 años no son de cerámica en frío, sino de piedras de todo tipo de materiales, formas y colores. Son collares inspirados en el estilismo de la década del 60 y 70, épocas de revolución cultural marcada por la libertad de expresión y la experimentación con formas y colores.
Para crear los collares busca piedras en las ferias de antigüedades de Valparaíso, en el persa Biobío, en tiendas de ropa usada y también compra en algunas picadas de bisutería del centro. Toda piedra que sea colorida, grande y de algún color o forma excéntrica, le sirve.
Cada pieza es única y para crearlas busca referencias en libros de moda, revistas y películas antiguas; y también juego con las formas y tonalidades de las piedras hasta dar con la unión perfecta. La idea es que quien los use se sienta especial y energizada o energizado por el color.
Instagram: @acintillada_eclectica
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