Al llegar la pandemia Pía se vio enfrentada a dos alternativas: dedicarse a ver Netflix o usar su tiempo y energía en ayudar. Sentía que vivía en una atmósfera negativa: estallido social, incertidumbre política, escasez de recursos y el aumento de casos activos Covid – 19. Viendo que sus proyecciones se llenaban de pesimismo, decidió visibilizar contenido positivo y creó una campaña de concientización regional en la que invitaba a los maulinos a priorizar la compra de productos regionales para así activar la economía local y con ello generar mayores empleos.
Puso en marcha la energía que la caracteriza y contactó medios de comunicación, celebridades, gobernantes, representantes y personal institucional de la VII región, para que el 31 de julio a las 8 de la noche subieran a sus redes sociales la campaña “Prefiero el Maule”. En una gran cartulina anotó una por una las personas e instituciones que se comprometieron, mientras su madre le comentaba que tenía poca fe en la campaña. Pía les iba a recordar cuando fuese el día, pero no fue necesario, todos la publicaron. Había funcionado.
A los tres días se sentó en su computador y comenzó a sumar las reproducciones de todas las personas que lo publicaron: 96 mil visualizaciones. Los maulinos comenzaron a enfrentarse al mensaje “Si es del Maule es bueno” pero no entendían de qué se trataba. “Si yo les doy esta idea de que lo proviene de la región es bueno, generando un sentido de pertenencia, las personas van a consumir” pensó Pía.
Hoy Prefiero el Maule genera 14 entrevistas semanales a productores locales. Los martes realiza vivos en Instagram con el periodista Nacho Gutiérrez y tres emprendedores de la región, quienes el día sábado de la misma semana aparecen publicados en el diario El Centro. Ese mismo día ella genera una entrevista a un trabajador en el medio Talca Digital. Los miércoles gestiona dos apariciones en TVMaule para estudiantes emprendedores de la Universidad de Talca, los jueves lleva a una persona al programa de radio FM Más. Los martes y jueves envía una nota al Diario Maule Hoy de emprendimientos y los viernes tiene un espacio de 15 minutos en TV Maulinos. Los sábados se entrevista a dos emprendimientos en el Diario Maule Informa y cada domingo una emprendedora maulina cuenta su historia en el medio Talca Capital.
Nacida y criada en la región del Maule, la mayoría de sus recuerdos son de ahí. Desde los tres años vivió con su madre Isabel y su hermano Alexis en el campo Tutuquén de su abuelo Eneas, ubicado en Curicó. También poseía un fundo en la playa Duhao Iloca, donde Pía pasaba sus veranos de diciembre a marzo. “Tengo recuerdos muy felices, era malilla, de hacer tonteras y molestar a mi abuelo. Una infancia libre “Nos íbamos a la playa solos, le amarrábamos una cuerda a una llanta y nos tirábamos para adentro a que el mar nos llevara, hasta que nos llamaban a comer con una campana”, cuenta. Pero muy responsable “Mi abuelo odiaba que no fuera al colegio. Para una tormenta que se inundaron los paso nos llevó en tractor y cuando se bloquearon las vías nos mandó en el helicóptero de nuestro tío”, relata.
Siempre muy cercana a la gente, participó de las vendimias desde muy chica e incluso se hizo cargo, junto a su primo, a los 14. Creció viendo a su abuelo con encanto por trabajar, de domingo a domingo, nunca cansado y siempre feliz de la vida.
Se fue a estudiar a la Universidad en Santiago, se graduó como relacionadora pública, fue gerenta de marketing del casino de Talca hasta que le dio estrés agudo durante los incendios forestales de 2017, mientras era líder regional de desafío Levantemos Chile. Terminó cinco días internada con pérdidas de memoria en la clínica. Para superar su crisis se enfocó en Dios.
A los tres meses de empezada la campaña de Prefiero el Maule, Pía había vuelto a su trabajo y llamó a los medios de comunicación para decirles que ya había sido suficiente y que el proyecto se acababa. “¿Por qué vas a detener algo que es tan bueno?”, le preguntaron y le informaron que ellos como medios no se iban a bajar. Al poco tiempo la desvincularon de su último trabajo en una viña y ella decidió que era su oportunidad para dedicarse de lleno a su proyecto.
Hoy quiere avanzar enfocándose en el turismo, los colegios y el desarrollo de la marca, cree que para generar un cambio debe impactar desde la base de la población, la educación. Quiere que cada poblador sea un embajador de la región, dando a conocer los productos y motivando a la inversión. Tiene el sueño de partir con un grupo de emprendedores a otros países para mostrar las tradiciones, el merken, las trufas y la cueca. “Quiero que la gente sienta que nada nos detiene si trabajamos juntos”, ella se visualiza como la directora de esta gran orquesta.
Y de tal palo tal astilla, como dice el dicho popular, pues la hija de Pía, Colomba de 19 años, fue reconocida dentro de las 100 mujeres líderes de El Mercurio por su emprendimiento de huertos. Quiere hacer una fundación enfocada en potenciar y maximizar las habilidades y talentos de los niños. Las ganas de Pía también se heredaron y con ello el impacto.
Pía se toma su tiempo, vive en libertad y comodidad. “No quiero mirar para atrás y decir solo trabajé. Quiero decir que trabajé, que ayudé y que disfruté de la vida”, dice. Está enfocada en regalonear a su madre y llevarla de viaje.