Por Paula Coddou
Paula 1242. Sábado 30 de diciembre de 2017.
SÍ se puede vivir con la mitad de la dieta parlamentaria. A pesar que lo dice alguien que todavía no tiene hijos. Espero tenerlos pronto y ahí les cuento. NO estuve de acuerdo con la decisión que tomaron este año sobre Javiera Parada. Fue una exageración. Lo que hizo no estuvo nada de bien, pero la gente puede cometer errores. Una cosa es querer hacer las cosas bien y otra es ponerse purista. SÍ se puede ser liberal e igualitario. Mi liberalismo al menos, entiende que es necesario un mínimo de igualdad para que florezca la libertad en los proyectos de vida individuales. NO me he arrepentido de no usar el apellido Verdugo. Mi viejo fue el principal promotor de que sus hijos usemos el apellido de nuestra madre primero. Él considera que la ley es machista y que la gente debería poder optar. SÍ admiro a mucha gente. Dos ejemplos: el Primer Ministro Trudeau de Canadá, un liberal igualitario, que ha demostrado hacerlo muy bien. Otro a quien admiro es a don Nicanor Parra. Me intriga, por su vitalidad. ¿De dónde proviene tanta creatividad? No lo conozco, pero me hubiese gustado que fuera mi abuelo.
NO fue fuerte cumplir 30 años. Así como difícil, no. Pero, el tiempo pasa rápido. La juventud es una enfermedad que se pasa. SÍ a un liberal en el Frente Amplio. Chile requiere de un pacto social para este nuevo momento. Este consenso debe combinar democracia auténtica, derechos sociales y libertad económica. NO es verdad que los croatas son mal genio. En mi caso tengo muy buen genio. Cuesta que me saquen de quicio. Tengo muuucha paciencia. Si me choreo, quiere decir que la cosa es bastante irreversible. SÍ admiro de alguien su capacidad de ser crítico y de reírse de sí mismo. No me gustan aquellos que andan por la vida como "aquí no entran balas". NO he superado el déficit atencional. (Me decían Vlado Volado). Sigo siendo muy disperso. Puedo hacer más de una cosa a la vez, de hecho me gusta. No me gusta mucho la rutina, prefiero rebuscar distintos caminos para llegar al mismo resultado. SÍ creo que la confianza es lo más importante con mi pareja. Saber que me puedo caer y estará ahí, o tener una confianza que nos hace jugar de memoria, es una complicidad que nos mantiene muy unidos, a pesar de la vida caótica que llevamos ambos. NO soy de los que les gustan los celos, de hecho me cargan. He visto que algunas parejas disfrutan de relaciones más tormentosas, donde los celos son casi una demostración de amor. No es mi caso. SÍ extraño muchas cosas de mi vida antes de ser diputado, por ejemplo, caminar sin apuro. Ahora todos mis pasos son para llegar rápido a algún lugar. No hay un minuto libre. Mi único lugar de descanso o concentración plena son los aviones. NO sé si hay algo después de la vida. Probablemente hay trascendencia, pero no sé en qué forma. Soy librepensador, es decir, mantengo una duda permanente, sin negación ni afirmación. Una búsqueda, sin pretensión de respuesta. En caso de ser creyente, sería politeísta. Creería en los dioses en plural.