Por más de diez años, 25 millones de personas desde México a Chile seguían a través de las pantallas de MTV a esta carismática argentina. Ruth tuvo el pelo fucsia cuando nadie lo tenía fucsia. Tuvo el pelo naranja cuando nadie lo tenía naranja. Era simpática, bonita, espontánea, inteligente y sobre todo sensible. A través de la televisión se podía sentir cómo amaba la música. Y nos hizo amarla a nosotras.

Sí, el canal MTV con toda su onda y recursos era el intermediario con los músicos que admirábamos, pero Ruth era la verdadera conexión humana. Era buena VJ porque explicaba lo que le gustaba. Empática, sencilla y directa, jamás se atrapó en lo superficial. “Soy una chica normal, con el pelo de otro color”, decía cuando le preguntaban por su estilo. Y la verdad es que era así. Más allá de su look alternativo, se presentaba como una mujer normal que amaba la música y que nos conectaba con nuevas canciones y sus videos.

Verla en sus programas era como sentarse en el living de una amiga que sabía mucho más que uno de música y estaba dispuesta, amorosamente, a compartir sus gustos con los tuyos. Era cercana, versátil y sencilla. Ruth supo retirarse a tiempo y dedicarse a otros proyectos. “MTV fue un trabajo fabuloso, de mucho aprendizaje y diversión, pero ya sobre el final extrañaba el anonimato”, dijo hace poco.

  • Estrellas: Como Madonna, Mick Jaegger y Britney Spears fueron entrevistadas por Ruth.
  • 50: son los años que tiene actualmente este verdadero ícono de los ’90.
  • Versátil: Además de VJ y animadora, Ruth es actriz. En 2001 actuó en +bien, una película donde compartía roles con Gustavo Cerati.
  • Conexión: El programa de Ruth era el más visto de la señal latinoamericana.