El llamado es claro. Si no es una urgencia o un trámite de primera necesidad, no deberíamos salir de la casa o departamento. El problema es cuando la línea se vuelve difusa, especialmente en relación a las consultas médicas ¿Deberíamos ir al doctor, por ejemplo, si sospechamos que tenemos una infección urinaria, aunque haya tenido varias veces y sepa tratarla?
“La cistitis aguda bacteriana es el tipo de infección urinaria más frecuente en las mujeres adultas con vida sexual activa, y también en las mujeres en etapa post menopaúsica”, define el urólogo de Clínica Las Condes, Humberto Chiang. Cuenta entre sus síntomas ardor o dolor al momento de orinar, necesidad de orinar con mucha frecuencia y presencia de orina turbia y de mal olor. Si se llegara a presentar dolor lumbar, malestar general y fiebre, se podría estar ante la presencia de una pielonefritis aguda, que es cuando la infección compromete los riñones.
En un contexto normal, lo primero que una persona debe hacer cuando sospecha que tiene una infección urinaria es ir donde un médico, quien dará una orden de hacer un examen de orina y un urocultivo. Si se confirma la infección, se indicarán antibióticos adecuados. Pero lo que pasa muchas veces es que quienes ya tienen un historial de este tipo de infecciones piensan que saben qué medicamentos necesitan y se saltan el control y los exámenes. Error.
“La automedicación con antibióticos no solo es peligrosa para un paciente en forma individual, ya que puede no ser el adecuado para su caso, sino que además permite que los micro organismos existentes en la comunidad adquieran cada vez mayor resistencia a los antibióticos, produciendo un riesgo mayor de tipo global”, advierte Chiang. Y añade: “En el caso de que las infecciones urinarias se hagan recurrentes o bien de que sean de mayor gravedad, es aún más recomendable consultar un urólogo para que pueda estudiar patologías que puedan causar o favorecer las infecciones como cálculos urinarios y neoplasias de la vejiga”.
¿Qué hacer en cuarentena?
Los expertos son enfáticos en decirle a la población que, en caso de enfermedades o controles médicos no relacionados al coronavirus, es importante consultar con un especialista. Las infecciones urinarias no son la excepción. “Actualmente existe una amplia disponibilidad de telemedicina, de modo que es fácil tener la opción de un médico, quien podrá analizar el caso y entregar las indicaciones que más se ajusten”, dice Chiang, quien agrega que, de ser necesario, hay equipo que toma muestras a domicilio.
“Por último, si el médico lo considera adecuado, podría indicar un tratamiento de prueba sólo con base en los antecedentes clínicos, sin exámenes de laboratorio”, añade como última alternativa.
Pero lo cierto es que es importante consultar con un especialista si se sospecha una infección urinaria. Se trata de un problema de fácil solución si se trata a tiempo y de manera adecuada, pero si se dejan pasar los síntomas, estos podrían terminar agravándose. “Una cistitis aguda bacteriana”, dice el urólogo, “podría progresar a pielonefritis aguda e incluso a una sepsis de origen urinario, sobre todo en personas mayores o con otras patologías”.