Pampeña

No le lnteresa leer el diario. Detesta el alcohol y las drogas. Nunca ha ido a terapia. Apoya el aborto terapéutico, el vientre de alquiler y el matrimonio homosexual. Carolina Ardohain es ingenua y arrojada: una mezcla propia de sus orígenes pampeños.




¿Pampita o Carolina?

Me encanta que me digan Pampita. Ya son 11 años y lo tengo incorporado y a la gente le encanta. Es que es más simple, más fácil. No me aburre para nada. Evoca a mis orígenes.

¿Sigues sintiéndote una chica de la pampa?

Totalmente. Yo soy de un pueblo chico en la pampa, que se llama Santa Rosa. Ahí sigue mi familia. Pero a los 17 años me cambié a Buenos Aires, porque tenía las ganas de estar en la gran ciudad, de crecer y tener oportunidades que en mi pueblo eran imposibles.

¿Y sigues yendo a tu pueblo?

A veces, pero en realidad a mi familia le resulta más atractivo visitarme en Buenos Aires. Con Benjamín tenemos una casa allí y otra en Santiago. Mis hijos se mueven entre varios lugares. Ahora nos vamos por seis meses a Buenos Aires, tenemos trabajo allá.

¿Te consideras una mamá común y corriente con tanto trabajo que tienes?

Claro que sí. Hago todo: los llevo a los cumpleaños, al colegio, a ballet, a fútbol… a todo. Los días que trabajo –que no son más de uno o dos por semana– hago turno con otra mamá para ir a buscarlos al colegio. Pero si no, lo hago todo yo. Voy al supermercado y a comprar los regalos para los cumpleaños a los que los invitan.

¿De qué cosas eres fanática?

¿Aparte de mis hijos? Soy fanática de la decoración. Compro cosas para las casas que tenemos en Buenos Aires y en Santiago y siempre las estoy cambiando de lugar. De repente pienso que tal cosa queda mejor en la otra casa y por eso en los aviones viajo llena de paquetes: una lámpara, almohadones y cosas de mucho volumen. También me encanta el arte. Uno de los gustitos que me doy es ir a las galerías y ver las propuestas de artistas nuevos.

¿Algún exponente chileno que te guste?

Soy bien admiradora del arte chileno. Me fascina Matta y tengo algunas obras de Cienfuegos porque me gusta su estilo único. Es simplemente genial.

Sin excesos

¿Es verdad eso de que haces como cien estocadas y cien abdominales diarios?

Todos los periodistas me preguntan eso. No soy tan fanática de los ejercicios como la gente se imagina. Pero siempre me he mantenido porque hice danza por muchos años. Además, tengo mucha energía y necesito descargarla, por eso siempre estoy haciendo cosas con mi cuerpo: trapecio un año, yoga otro año… En realidad hago cosas que me divierten, más que meterme al gimnasio.

Todos los periodistas preguntan eso y todas las modelos responden que no se cuidan demasiado y que comen de todo.

Es que la clave está en los hábitos. No salgo de noche, no tomo alcohol, no fumo. Tengo buenos hábitos. Soy responsable con mis tiempos y trabajo lo justo y necesario y eso me mantiene en buen estado. Pero de verdad que no me cuido con las comidas.

¿De verdad no tomas alcohol?, ¿ni siquiera para el Año Nuevo?

Jamás. No he tomado ni una gota de alcohol en mi vida. Ni para el brindis de Año Nuevo.

¿Y nunca tuviste un exceso entonces?

Nunca. Soy bien correcta conmigo misma. Siempre he tenido que ser muy responsable con el trabajo y con excesos es imposible.

Entonces asumo que marihuana tampoco…

Nunca he fumado marihuana. No es lo mío. Es que de verdad no me imagino en un momento de desenfreno. No va con mi personalidad.

¿Y tus amigos no te encuentran fome?

No. Por algo son mis amigos.

Igual las argentinas tienen fama de ser más preocupadas de mantener bien el cuerpo.

Las argentinas somos bien aplicadas con cuidar el cuerpo. Nos encanta ser mujer y estar lindas para nosotras mismas y somos prolijas y determinadas. Ahora, esto no significa que en Chile sea muy distinto. Tengo un montón de amigas chilenas que son regias y no les encuentro diferencia con las argentinas.

Con tanta vida sana, te debes enfermar poco. ¿Tomas remedios?

No tomo nada de nada. Una gripe me puede durar un mes porque no tomo remedios.

Y para otro tipo de problemas, ¿vas al terapeuta?

Nunca he ido al terapeuta. Le pido ayuda a mis seres queridos, que son los que me contienen, me dicen la verdad y me aconsejan.

Pensamiento liberal

Las argentinas tienen fama de decir lo que piensan, ¿eres de esas?

No tengo drama con decir lo que pienso, pero soy bien respetuosa de la opinión de los demás. No se trata de imponer mi punto de vista. Es más, no me gusta esa gente que dice todo lo que piensa. Eso de "te lo digo en buena onda, pero te lo digo igual", no les creo nada. Mejor que se guarden los comentarios.

¿Qué opinas de Ricky Martin o Miguel Bosé que usaron vientres de alquiler para tener hijos?

Me parece fantástico. El vientre de alquiler es una ayuda para todas esas personas que quieren dar amor y no pueden. No por ser homosexuales no van a poder experimentar la paternidad. No tiene nada que ver una cosa con la otra.

Entonces estás a favor del matrimonio homosexual.

Por supuesto. Yo tengo un pensamiento abierto. Me llena de orgullo que en Argentina el matrimonio homosexual sea legal. Tengo miles de amigos homosexuales y me encanta que en mi país tengan el derecho de casarse. Eso si, sinceramente, no sé si va a pasar lo mismo en Chile. Falta mucho para eso.

¿Por qué?

Porque en Argentina llevamos muchos años hablando, educando y entendiendo el tema y en Chile recién se abre una discusión al respecto. Los argentinos estamos más abiertos a debatir las formas de pensar, somos menos prejuiciosos que los chilenos, por eso creo que aquí va a costar mucho más.

¿Y si tu hijo te dice que es gay?

Mis hijos son libres. La vida es de ellos y pueden hacer lo que quieran, siempre que sean buenas personas, que es lo único que realmente me importa. No tengo expectativas con sus vidas. Ellos son los dueños de sus vidas y no me importa si uno dice que es gay. Lo único que quiero es que sean felices.

¿A favor o en contra del aborto?

Cuando está en riesgo la vida de la madre a favor del aborto.

¿Qué te parece que en las teleseries ahora se incluyan temas de trasfondo como la pedofilia?

Creo que la gente está preparada para que la desafíen. Me gusta que las temáticas sean cada vez más arriesgadas y que el debate tenga lugar en la tele. Es una buena señal que la tele esté abierta a otras cosas y que la audiencia esté distinta y más exigente.

¿Lees diarios?

No. No soy suscriptora de ninguno y no los compro. Es que no tengo tiempo. Prefiero mirar las noticias.

Bueno, pero por lo menos lees libros, ¿o no?

Ahora estoy leyendo la trilogía Millenium, de Stieg Larsson. No tenía muchas ganas de leerla, pero en el verano vi a tanta gente leyéndola en la playa, en los aviones… en todos lados. Vi a hombres leyéndola, entonces supe que no era una trama romántica y me intrigó saber qué era. Voy en el segundo tomo y creo que todo el boom del libro es una exageración. Es bien entretenido, pero no es tan bueno. Igual estoy obligada a leerme el tercero para no quedarme con la curiosidad.

¿Y qué libro sí te ha gustado mucho?

Cualquiera de Isabel Allende. Soy su fan. Desde los 15 leí sus libros y los tengo todos. De hecho, una vez tuve la oportunidad de estar con ella y me firmó algunos. Encuentro que es una excelente embajadora chilena porque a través de sus libros se rescata y conoce la historia de Chile.

Con tantas películas que ha hecho Benjamín, te debe gustar el cine.

Soy muy cinéfila, me veo todo. En una tarde me veo cuatro películas.

¿Eres de la web 2.0?

No tengo ni facebook ni twitter. Hay que dedicarles demasiado tiempo. Tendría que estar siempre escribiendo cosas, porque es como un compromiso con la gente que te sigue y a veces no tengo ganas de decir nada. ¿A quién le importa si te estás comiendo una hamburguesa en tu casa? O twittear que saliste a comer es un verdadero peligro. ¡Cualquiera se podría enterar que tu casa está vacía y entrar a robar!

Con once años de fama, ¿todavía te piden autógrafos o ya diste todos?

No. Ahora no me piden. Es que el autógrafo se extinguió. Ahora todos tienen celular con cámara y nadie quiere un papel firmado, solo fotos.

Hablando de once años de trayectoria, te pregunté antes cuántos años tienes y no me respondiste.

Nunca he dicho mi verdadera edad y jamás lo haré.

Qué raro, si eres joven. En internet y revistas sale que naciste el 81 en todo caso, andarías por los 30.

Las fechas y años que salen en los medios son falsos. Eso es lo único que puedo decirte.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.