“Un día estaba hablando con un amigo que me contó que estaba participando en un estudio para probar un nuevo método anticonceptivo para hombres. Se trataba de un gel. Ahí mismo me interesé en participar, me parecía muy interesante la idea de tomar las riendas de la anticoncepción en la relación, de tener la posibilidad de ser el que se cuida. Además, me gustó la idea de tener la oportunidad de participar en un progreso científico tan importante. Me puse en contacto con una enfermera y en agosto de 2022 empecé el proceso.
Tengo 27 años y con mi pareja estamos juntos hace cuatro años y medio. Uno de los requisitos para participar en esta investigación era tener una pareja estable que durara todo el tiempo del estudio. También me hicieron test de sangre y de drogas.
Por un año, todos los días me apliqué un anticonceptivo en gel en el sector de los hombros. No me tomaba más de un minuto de aplicación. Al principio cada dos semanas y después una vez al mes me hacían un espermiograma para ver cómo estaba todo. Cuando llevaba alrededor de tres meses aplicándome el gel, hicieron que mi pareja dejara de tomar anticonceptivos para comprobar la efectividad del nuevo producto.
Yo en particular estaba super entusiasmado con este gel, lo encontraba un producto muy interesante. ¿Si tuvimos miedo de embarazarnos cuando ella dejó los anticonceptivos? Sí, y harto. Pero también confiábamos en el equipo que había detrás. Todos fueron siempre súper transparentes con el traspaso de información, entonces cuando nos dijeron que podíamos dejar los anticonceptivos y los preservativos, confiamos. Mi pareja ya había participado en estudios del tipo antes y teníamos la certeza de que eran estudios serios.
Durante todo el periodo que ha durado la investigación, he tenido contacto semanal con una enfermera que me va haciendo seguimiento de cómo me siento, si había perdido alguna dosis o cosas así. Ellas llevan todo el registro de las horas de aplicación, y observaciones del tipo si había tomado algún medicamento. En mi caso siempre estuvo todo en orden.
Mi fase dos ya se acabó y ahora estoy en la fase de recuperación de espermatozoides. Terminé hace como un mes y medio. Ahora me miden si mis espermios funcionan como antes y qué tan rápido han vuelto a funcionar. Hasta ahora ha salido todo bien. Yo nunca tuve ningún problema, ningún efecto secundario, y mi amigo tampoco.
En esta fase, y mientras dure el estudio, debemos volver a métodos anticonceptivos tradicionales. Si yo tuviese la opción de seguir utilizando el gel lo seguiría haciendo. Es súper cómodo, no huele, no es pegajoso, no tuvo en mí efectos secundarios, nada.
“Para ella sí tiene efectos usar métodos anticonceptivos”
Con mi pareja lo hemos hablado. Si esto se comercializara, lo usaríamos. Las pastillas anticonceptivas femeninas son quizás más económicas que usar preservativos, pero tienen un impacto en la salud de las mujeres, y en cambio a mi con el gel nunca me pasó nada. Usaríamos este nuevo producto porque para mí no tiene ningún efecto, mientras que para ella usar anticonceptivos sí los tiene.
Mi polola estaba feliz sin tomar pastillas anticonceptivas. Ella empezó muy joven, entonces no sabía muchas cosas hormonales de su cuerpo. Dejar las pastillas fue todo un redescubrimiento, y por eso mismo estábamos súper contentos de ser parte de este estudio. Yo estaba feliz de que ella se sintiera bien. Ahora ocupamos solo preservativos, porque después de que se dio cuenta todo lo que pasaba con su cuerpo al tomar anticonceptivos ya no quiere volver a tomarlos. Es cosa de tomar una caja y ver la cantidad de contraindicaciones que tienen para ellas, mientras que el gel no tiene prácticamente nada.
Ser papás está descartado completamente en el corto plazo para nosotros. Optamos por probar este método anticonceptivo nuevo por lo de los síntomas de ella y porque queríamos aportar en el desarrollo científico, pero la posibilidad de una vasectomía también está sobre la mesa. No sé si en 15 años más nos den ganas de tener hijos, pero hoy tenemos claro que no los queremos. Quizás mientras no lo tengamos completamente claro, este método anticonceptivo para hombres funciona muchísimo mejor.
Encuentro increíble que se estén haciendo este tipo de pruebas en Chile. Cuando lo comento con mis amigos y cercanos, suenan super interesados, pero es hasta ahí no más. No están dispuestos a probarlos. Me encantaría que más gente se atreviera a participar de este tipo de estudios porque no puede existir una opción más amplia de anticonceptivos si no damos el paso a probarlos.
Los siguientes pasos
De manera inédita, Chile -a través de la clínica SG Fertility- forma parte de este estudio internacional que por primera vez prueba este método anticonceptivo en humanos y no en ratones. La investigación, patrocinada por el National Institute of Health y Population Council de Estados Unidos, está estudiando a personas de algunos países de Europa, África y, en América Latina, el único país que forma parte es Chile.
Liderado por el médico urólogo y andrólogo José Ignacio Vinay, quien es el investigador principal, acompañado de un equipo amplio de enfermeras que llevan la coordinación y operativa lideradas por Alejandra Díaz, en el estudio participan hombres entre 18 y 50 años.
Actualmente, la investigación se encuentra en la segunda fase, dado que algunos participantes siguen en la fase de recuperación. En este periodo, un grupo de hombres y por un tiempo específico, se aplicaron el gel mientras se les hacían exámenes de espermiograma para verificar que la concentración de espermios pasara del valor mínimo de normalidad de 16 millones/ml, a cero. El requisito era que los participantes tuviesen una vida sexual activa.
El gel es un medicamento tópico que contiene hormonas, y según definió el equipo del estudio, la aplicación debía ser diaria, ojalá en el mismo horario y en la zona de los brazos y los hombros, dado que son zonas de menor contacto.
Si bien el doctor Vinay -investigador principal y quien lidera desde SG Fertility la investigación-, explica que aún no se sabe cuándo comenzará con exactitud la tercera fase del estudio, señala que debería ser el próximo año. De esa manera, y si todo sale como se espera, el primer anticonceptivo masculino podría empezar a comercializarse en el futuro cercano”.