Paula 1085. Sábado 17 de diciembre de 2011.

La Marca, pura carne

Cuando el matrimonio formado por María José Becerra y Alfredo Ginpel decidió abrir el restorán La Marca, hace dos años, tenía una cosa clarísima: su cocina debía exudar aires sureños: con olor a madera, a brasas, a pan amasado. Pero, sobre todo, querían que a los comensales se les hiciera agua la boca con el olorcito a carne, su especialidad. Tan bien les fue el primer año, que a su local del centro sumaron, a principios de 2011, una segunda sucursal en la costanera, a orillas del lago Llanquihue, en una típica casona de tejuelas. Con grandiosa vista al volcán Osorno, una vez sentado allí es imposible no tentarse con un sour de murta, con las empanadas fritas de carne de cordero o unas mollejas de ternera. De fondo, pura carne de exportación: asado de tira y lomo de angus o wagyu. Se piden por corte, -que puede llegar a los 500 gramos-, y se acompañan con ensaladas o guarniciones más contundentes como hongos gratinados con roquefort en lebrillo. Consumo promedio: $16.000 por persona. Fono (065) 23 2026. www.lamarca.cl

La carta del restorán La Marca permite a los comensales elegir la carne según corte: hay de 200, de 300 e incluso de 500 gramos.

Miraolas regional

Rankeado como uno de los mejores restoranes de pescados y mariscos de Santiago por distintas guías gastronómicas, el Miraolas acaba de emprender su primera aventura fuera de la capital: a principios de noviembre abrió en Puerto Varas, en una remodelada casa a los pies del hotel Cabañas del Lago. Para garantizar el sabor y la calidad de sus dos locales en Vitacura, los dueños enviaron a un equipo de Santiago, que trabaja enseñándole al pie de la letra a su nuevo staff sureño las recetas por las cuales cosechan aplausos, todas preparaciones sencillas, con toques de cocina vasca. La carta de Puerto Varas es casi idéntica a la santiaguina, con celebrados platos como el pulpo a la gallega, los pimientos rellenos con carne de jaiba, los chipirones –calamares apanados y rellenos con su carne–, además de las ostras, las machas a la parmesana, la merluza austral y la langosta de Juan Fernández, tan escasa por estos lados y que para mantener fresca, conservan en una piscina especialmente acondicionada. Calle Santa Rosa 040, cel 9079 3938.