Tea dress, el vestido que manda en verano
La imagen de la princesa inglesa Kate en su primera aparición pública post parto mostró no solo a su heredero, sino también un vestido con lunares blancos que emulaba el llevado por su suegra Diana una veintena de años antes. Ese diseño simplón, furor de ventas y copiado infinitamente, pertenece a un mundo variado de vestidos llamados "tea dresses", con una antigua tradición ligada a la hora del té.
Paula 1130. Sábado 14 de septiembre 2013.
La imagen de la princesa inglesa Kate en su primera aparición pública post parto mostró no solo a su heredero, sino también un vestido con lunares blancos que emulaba el llevado por su suegra Diana una veintena de años antes. Ese diseño simplón, furor de ventas y copiado infinitamente, pertenece a un mundo variado de vestidos llamados "tea dresses", con una antigua tradición ligada a la hora del té.
Como un oasis femenino, en medio de la cada día más andrógina silueta de la moda, aparece, junto al calor, el versátil vestido liviano llamado tea dress. Toda una historia a cuestas, y miles de opciones y formas, hacen que un mismo vestido pueda hacer parecer a una misma mujer varias y muy diferentes.
La historia del tea dress comienza junto con los inicios de la moda de tomar el té por la tarde. Se dice que tal costumbre la originó la duodécima duquesa de Bedford, María Stanhope, en 1841, cuya hambruna desarrollada entre el fin del almuerzo al mediodía, y el comienzo de la comida nocturna –cerca de las 9 de la noche–, la hizo implementar entre las 4 y 5 de la tarde una hora del té en que la golosa duquesa se servía a gusto. La moda fue rápidamente replicada en Inglaterra y se desarrolló toda una manera específica de vestirse para la ocasión. Vestidos informales y desestructurados, inspirados en Oriente y en el kimono, comenzaron a verse primero dentro de las casas y luego por las calles.
El tea dress hoy es un universo de vestidos difícil de definir porque su corte, largo y formas son variados. En Chile se les conoce como "vestiditos" y, según cómo se les complemente con los accesorios, pueden servir a muchos rangos de formalidad, así como a la más estilosa o ramplona informalidad.
Una clase maestra de tea dresses la dio la colección primavera-verano 2013 de Bottega Venetta, y tanto editoriales de moda como fashionistas se tomaron las calurosas calles del Hemisferio Norte para lucir su estilo.
* La diferencia entre el tea dress y el vestido de cóctel se hace cada día más difusa. En general se puede decir que el vestido de cóctel (o cocktail dress) se confecciona con materiales más finos y su aspecto da inequívocamente la impresión de formalidad y de que debe ser usado desde el atardecer en adelante.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.