Paula 1199. Sábado 7 de mayo de 2016.
Grotesco y mordaz
Con un trabajo actoral riguroso y una dirección que transita por la comedia negra y el grotesco, La Niña Horrible se ha convertido en una de las compañías locales de mayor proyección. Sus primeras producciones –Sentimientos e Historias de amputación a la hora del té– generaron un público de incondicionales que suele repetirse funciones y que les sigue en cada estreno, como ocurrió el año pasado con En el jardín de rosas.
La escritura de Carla Zúñiga escarba en las contradicciones de situaciones cotidianas y hace evidente cómo operan las dinámicas de género en su dimensión más perversa. La dirección de Javier Casanga imprime un sello extravagante, irrisorio y trágico a los montajes asentado en un travestismo desmesurado, que adquiere un vuelo poético y mordaz a la vez.
En septiembre estrenarán La trágica agonía de un pájaro azul que se enfoca en los intentos suicidas de una mujer de 40 años tras la muerte de su única hija. La anécdota es la excusa para abordar el lugar que ocupa una madre soltera en un sistema patriarcal.
La obra se presentará en la sala Camilo Henríquez y reunirá a Felipe Zepeda, Juan Pablo Fuentes,
Coca Miranda, Carla Gaete, Daniel Alarcón, Sebastián Ibacache, Mario Olivares, Vicente Cabrera, Ítalo Spotorno, Maritza Farías y Claudia Vargas.
Voces de un café con piernas
Con la capacidad para convertir pequeñas historias en textos de gran belleza lírica, Santiago Loza es un autor fundamental en la escena teatral de Buenos Aires. En Chile se dio a conocer con títulos como La mujer puerca, Todo verde y Mau Mau o la tercera parte de la noche y ahora estrena Un minuto feliz. La pieza se ambienta en un café con piernas de Santiago y las voces corresponden a tres mujeres que testimonian el paso del tiempo en una rutina apesadumbrada, donde los momentos alegres son escasos. Loza se vale del relato de los personajes para internarse con sutileza por cuestionamientos que trascienden al momento y que se convierten, además, en un espejo del país. El montaje es dirigido por Aliocha de la Sotta, reúne a Coca Guazzini, Paula Zúñiga y Caro Quito, y cuenta con el diseño integral de Rocío Hernández y música de Fernando Milagros. Se estrena en mayo en el GAM.
Con Nuevos trabajos de directores reconocidos y remontajes, la temporada 2016 promete ser vibrante en cantidad y EN calidad.
Dramaturgia punzante
En 2015, Dónde viven los bárbaros obtuvo notoriedad por la manera atípica en que aborda la segregación y la violencia en Chile. Con una estilizada metáfora y una trama que cautiva por sus quiebres, ubica al espectador en una zona inquietante donde ninguna lectura del reencuentro de tres primos parece definitiva, y las confesiones y sospechas mutuas le imprimen una tensa atmósfera. La obra retrata el pavor que emerge en una comunidad cuando se enfrenta a lo distinto y desnuda la violencia de una sociedad renuente a mirarse a sí misma. El remontaje de junio en el Teatro del Puente es la oportunidad para descrubir o reencontrarse con la escritura de Pablo Manzi, un autor indispensable que tiene la capacidad de hablar de las fisuras de los discursos políticamente correctos. El texto adquiere mayor ambigüedad gracias a la actuación de Carlos Donoso, Gabriel Cañas, Gabriel Urzúa, Franco Toledo y Paulina Giglio, dirigidos por Andreína Olivari y el propio dramaturgo. Mención aparte merece el diseño de Juan Andrés Rivera y Felipe Olivares.
Lo nuevo de los directores reconocidos
La cartelera de 2016 se definirá también a partir de los nuevos trabajos de directores reconocidos: Álvaro Viguera montará en junio en Centro Mori la obra Pulmones, del inglés Duncan Macmillan, con Francisca Lewin y Francisco Ossa; Manuela Infante estrenará en julio en CA660 el resultado de una extensa investigación titulada Realismo, junto a su compañía Teatro de Chile; Ramón Griffero presentará en el mismo mes en la sala Camilo Henríquez una nueva versión de 99 La morgue, un indispensable de su autoría con nuevo elenco; Rodrigo Pérez llevará a escena en agosto en GAM La viuda de Apablaza, de Germán Luco Cruchaga, con Catalina Saavedra y Francisco Ossa en los protagónicos; y Héctor Noguera dirigirá en octubre en Teatro UC la versión teatral de la novela Jardín, de Pablo Simonetti, adaptada por Emilia Noguera, con actuaciones de Blanca Mallol, Cristián Campos, Francisca Imboden, Mario Horton y Carmen Disa.
Repensar la ópera
En Concierto y Agnetha Kurtz Roca Method, Ana Luz Ormazábal dio testimonio de cómo las nuevas generaciones repiensan la performance, en especial los lugares comunes que terminaron ahogando toda irreverencia.
Junto a su compañía se encuentra en pleno proceso de investigación de Ópera, proyecto que se estrenará en agosto en Nave y que revisa las convenciones de lo operático como lenguaje artístico y evento social. El montaje toma como punto de partida a la compañía lírica italiana Pantanelli y su intento por llevar a escena la ópera Lautaro, de Eliodoro Ortiz de Zárate, tal como lo hicieron en 1902, aunque en un contexto distinto. El ejercicio servirá, además, para establecer interrogantes sobre el rol legitimador que cumplen los recintos líricos, como el Teatro Municipal de Santiago, en momentos en que los públicos han cambiado.
La composición musical es de José Manuel Gatica y participan Esteban Cerda, Diana Carvajal, Nicole Sazo, José Ignacio
de Vries, Camila González, Manoj Mathai, Samantha Manzur y Macarena Rozic